Siempre me han asustado los nombres que incitan al trabajo, y además intentamos desde aquí no hacer publicidad del olvido visto lo visto en la multitudinaria convocatoria para el pistoletazo de salida de su campaña en Policlínica Miramar. Ni un alma, retirados los cascotes del resto de su candidatura -tampoco al completo- y de dos periodistas de esta casa. Ni Fernando Esteso en aquellos tiempos de los bingueros.
Acambio nos centramos hoy en otros saldos sanitarios, unos realmente sorprendentes que nos dejan publicidad y marketing de lo que realmente venimos siendo en este sector, porque la publicidad de este tipo no refleja lo que hacemos sino lo que somos y sobre todo hacia donde nos dirigimos.
Leo en la página no sé cuantos de no sé qué periódico de esta comunidad de hablantes una publicidad inquietante sobre pruebas radiológicas varias. El anuncio es toda una declaración de principios: PROGRAMASALUD SIN (subrayado) ESPERAS, dice. Ya continuación una tabla en la que te dicen por cuánta pasta puedes hacerte una resonancia, una tomografía, una eco o incluso mamografías varias.
Empezando por el principio, hablar de contención de listas de espera en el anuncio, que una clínica privada como Quirón Palmaplanasutilice el recurso facilón de la espera en la sanidad pública para publicitar sus servicios, aunque feo, no resulta del todo censurable. Resulta curiosa en estos tiempos de crisis y ajustes esa deslealtad con la sanidad pública cuando todos sabemos de que han vivido mayoritariamente mamotretos hospitalarios como ese. Y no es censurable porque en este mundo hay quien mata por una razón de Estado, y hasta hay quien promociona publicamente lo que roba en privado. Somos así. El negoci es el negoci, y llegados al punto del comercio sanitario, llegados al vuelta y vuelta de la carnaza del paciente, llegados ya a lo que somos y a lo que nos hemos convertido, uno espera que pronto la sanidad se convierta en un Mac Menú de esos de euro por prueba diagnóstica. Ya sabe el conseller Sansalonique han llegado las rebajas a Quirón Palmaplanas y que puede negociar con ellos con un amplio margen de diferencia que tienda al ahorro público.
Gracias al excel de la publicidad de Quirón Palmaplanas sabemos a cuánto trabaja el personal. Hoy sabemos que en ese centro sanitario están de oferta las ecografías, y sabemos también para nuestra desgracia que hay Resonancias Magnéticas “Especiales”, que debe ser algo así como que te acunen mientras tanto o que te prometan un final feliz, un “happy end” de que lo que tienes se arregla con los 350 euros con que se anuncia. Hoy nos imaginamos a todo ese cuerpo radiológico y de profesionalidad indudable metido en galeras con sus números, multiplicando por euros todo ese conjunto de mamas radiografiadas, sumando incansablemente hígados y úteros, muchos úteros, a toda esta gran oferta sanitaria.
Estaba pensando (ya que no cobro por escribir) poner a disposición de esa clínica, de otra clínica, de cualquier centro sanitario, este espacio de mi columna para anunciar rebajas de cualquier cosa que pueda sanarse, sobre todo porque no hay nadie que dude de que aquí se publicaría cualquier cosa a cambio de dinero. Hecho de menos en toda esa publicidad la “happy hour”, ese momento del día en que el chute de contraste para el TAC sea diez euros más barato (aquí te lo ofertan a 95 euros), ese momento en el que poder disfrutar de la suculenta oferta de radiaciones ahorrando para -al salir- tomarte una caña.
Sigo haciendo desde aquí publicidad a la publicidad de Quirón Palmaplanas, y de lo que no habla es de qué pinta Sergi Bertrán, nuevo gerente de CAEBy su ex gerente, junto a la nueva presidenta de esa entidad, Carmen Planas, que es además copropietaria de todo ese Corte Inglés al que le ha llegado la Primavera. Me ofrezco a contarlo, previa rebaja, previo pago o previa radiografía de la zona de lesión. Queda dicho.