El Hospital de Llevant cuenta desde este mes de abril con una resonancia magnética abierta, una de las pocas existentes hoy en Baleares y una de las más avanzadas tecnológicamente.
La resonancia magnética abierta, según explican desde el área de radiología del Hospital de Llevant, presenta importantes ventajas sobre las resonancias convencionales (cerradas) y por tanto, supone una mejora muy destacable para el paciente.
En primer lugar, al tener los laterales abiertos, este tipo de resonancia abierta disminuye considerablemente la sensación de claustrofobia durante la exploración, que suele durar entre 20-50 minutos.
Además el hecho de tener los laterales abiertos favorece también que se pueda realizar el estudio a pacientes muy corpulentos que sobrepasen las medidas de la RM cerrada.
Por otro lado, facilita que el paciente pueda observar a un familiar o al personal sanitario que se encuentre dentro de la sala, algo que puede ser necesario especialmente en exploraciones a pacientes pediátricos o ancianos.
Por último la gran amplitud del diseño abierto de estas RM permite posicionar la parte del cuerpo del paciente que se va explorar en el centro del campo magnético lo que ayuda a obtener imágenes con mejor calidad de la zona a estudio.
La RM abierta que pone al servicio de sus pacientes el Hospital de Llevant es una de las pocas existentes en Balears, ya que, en líneas generales, la mayoría de las RM suelen ser cerradas. Además, el hospital ha optado por una de las resonancias abiertas de tecnología más avanzada, ya que con 0,4 Teslas es la de mayor resolución de les Illes Balears, situándose por encima de la media en el campo de las RM abiertas.
Las resonancias magnéticas se pueden utilizar para estudiar prácticamente cualquier estructura y órgano del cuerpo humano. Principalmente se usa para la exploración de articulaciones (hombro, rodilla, cadera…), columna vertebral y sistema nervioso central.
Aunque cada vez se está recurriendo a ellas para examen de tórax, abdomen superior (hígado, páncreas, vía biliar), abdomen inferior (patología prostática y ginecológica), para la patología mamaria y estudios cardiacos. Además la RM es una excelente técnica para la exploración de la patología vascular de cualquier parte del cuerpo.
La RM es la prueba de imagen diagnóstica más avanzada hoy en día. Puede ayudar a diagnosticar una amplia gama de patologías en distintos órganos. Gracias a ella se pueden diagnosticar pequeñas roturas meniscales (de hasta 1-2 mm), lesiones y desgarros musculares y de la unión miotendinosa, hernias discales, lesiones intracraneales tanto benignas como malignas, tumoraciones hepáticas, renales, suprarrenales, mediastínicas… También malformaciones vasculares, aneurismas o estenosis arteriales así como controlar la evolución de aneurismas aórticos.
Hay que resaltar también que las resonancias magnéticas son muy seguras. La RM no utiliza radiaciones ionizantes ni sustancias radioactivas para la obtención de las imágenes.
Por tanto, quien vaya a someterse a una RM, debe estar tranquilo. Sólo hay unos pocos casos en los que no está indicada.
Yes así porque para poder tomar las imágenes se necesita crear un campo magnético muy potente, podemos decir que “una RM es como un gran imán”. Por ello, en líneas generales, no se puede introducir en la sala de RM a pacientes portadores de un marcapasos, ya que puede afectar a su correcto funcionamiento.
Tampoco se puede introducir en una RM a pacientes con implantes cocleares y neuroestimudores, aunque pueden existir algunas excepciones… por ejemplo, ya existen marcapasos compatibles con RM… Pacientes con esquirlas de metal ferromagnético intraoculares o clips quirúrgicos ferromagnéticos intracraneales tampoco pueden exponerse al campo magnético por el riesgo de que el metal migre por la atracción magnética y afecte a estructuras adyacentes.
No obstante, la gran mayoría de clips quirúrgicos intracraneales utilizados actualmente no son ferromagnéticos y por tanto son compatibles con la RM. En el resto del cuerpo humano se crea tejido fibrótico alrededor lo que impide que el material ferromagnético migre por la atracción del campo magnético.
Finalmente, no hay evidencia científica que sugiera que exista riesgo para el feto si realizamos una RM durante el embarazo. No obstante, dado que en el primer trimestre de embarazo se da la organogénesis activa, se recomienda posponer la realización de esta prueba a no ser que los beneficios potenciales sobrepasen a los riesgos teóricos.