Son conclusiones de la I Reunión Internacional de Expertos en Cirugía Prostática con Láser Verde, que reunió, del 16 al 18 de junio, a algunos de los principales expertos mundiales en cirugía prostática, en la Clínica CEMTRO de Madrid.
La HBPes una patología que afecta a todos los varones a partir de los 30 años y que a partir de los 60 empieza a dar síntomas en la mitad de ellos.
Con la enucleación prostática con láser verde, desarrollada por el doctor Fernando Gómez Sancha, jefe del Servicio de Urología de la Clinica CEMTRO y director del Instituto de Cirugía Urológica Avanzada (ICUA), se elimina todo el tejido tumoral benigno, el adenomatoso, en una sola intervención, y sin sangrado.
Apartir de los 30 años, todos los hombres empiezan a experimentar un agrandamiento progresivo de la parte central de la próstata, la HBP o adenoma de próstata. En palabras del doctor Gómez Sancha, “este crecimiento con el paso del tiempo ocasiona síntomas urinarios al obstruir la uretra prostática y dificultar la micción, que se agrava con la edad, y llega a afectar al noventa por ciento de los varones de más de ochenta años”. Aunque el tratamiento inicial se realiza con fármacos, con el paso del tiempo, una quinta parte de los hombres necesitará someterse a cirugía.
La técnica de enucleación prostática con láser verde ha permitido incluir numerosas mejoras en la cirugía de HBP, como disminuir y mejorar el postoperatorio y el riesgo quirúrgico, reducir la tasa de complicaciones como el sangrado, y la extracción del adenoma en su totalidad para su posterior análisis.
Según Gómez Sancha, las cirugías convencionales “son más complicadas y agresivas y, por tanto, conllevan más tiempo de estancia hospitalaria y pueden precisar transfusiones sanguíneas durante o tras la intervención. El láser verde ya se utiliza desde 2003 con la técnica de fotovaporización, con la que se permitió operar a los pacientes en régimen ambulatorio o con una estancia menor de 24 horas y se redujo la tasa de transfusión sanguínea. Sin embargo, el problema es que no consigue extirpar todo el tejido adenomatoso, circunstancia que conlleva una tasa de reintervenciones de entre el quince y el veinte por ciento al cabo de cinco años”.
Tampoco lograba intervenir próstatas grandes (una de cada cuatro en mayores de 65 años), y destruía el tejido sin poder analizarlo, por lo que, si había un cáncer oculto localizado en la parte central de la próstata, se retrasaba su diagnóstico.
Un estudio coordinado por el doctor Gómez Sancha concluye que la técnica de enucleación prostática con láser verde permite tratar próstatas más grandes que las tratadas con la técnica de fotovaporización.
Otro de los inconvenientes de la cirugía convencional es que ocasiona un riesgo de entre el dos y el cuatro por ciento de disfunción eréctil e incontinencia urinaria postoperatorias.