Finalmente, Rosa María Hernádez, ‘Xama’ ha tomado posesión como presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de Baleares (COIBA) tras la extraña operación de la ‘oposición’ que pretende que el candidato que perdió las elecciones en 2010 es el legítimo presidente colegial.
“A las colegiadas y colegiados del Colegio de Enfermería de les Illes Balears, a los directivos del Ib-Salut e Instituciones Sanitarias, a los Presidentes de Colegios Profesionales, a los medios de comunicación y a la sociedad, en general, que pueda tener interés en cuanto afecta al colectivo de enfermería”.
Así se dirige ‘Xama’ en un comunicado al sector, explicando la situación generada el martes 10 de marzo cuando el cabeza de lista de la candidatura alternativa a la continuidad de la presidencia daba un inesperado golpe al proceso electoral que debía culminar ese día con las elecciones, dando éstas por ilegales.
“Hoy, 10 de marzo de 2015, entre las 10h y las 20h, estaba prevista la votación para elegir Junta de Gobierno del Colegio de Enfermería de les Illes Balears pero ayer, a las 15:30h, el candidato Sr. Buades presentó escrito por el que renunciaba y desistía a presentarse a estas elecciones”, recuerda el comunicado y añade:
“De acuerdo con los Estatutos, reunida la Mesa Electoral, procedió a la proclamación directa de la única candidatura, la encabezada por la Sra. Hernández. Frente a los escritos remitidos por los Sres Buades y Reynés, y por el propio Consejo General de Enfermería, solo cabe una respuesta:”
“En democracia no cabe otro mecanismo que el proceso electoral para el acceso a los órganos de gobierno. Si los Sres. Buades y Reynés u otro, se ven capaces de ganarse la confianza de los colegiados (…) no tienen más que reunir el valor para enfrentarse a las elecciones y aceptar con dignidad los resultados”.
Así se aludía a la insistencia de Miquel Reynés de ser presidente del COIBA, con el aval de una controvertida resolución del Consejo General de Enfermería que ordena la destitución de ‘Xama’ (ya antes de las elecciones) en base a unas irregularidades, cuatro años atrás, en su lista, jamás demostradas judicialmente.
Buades, de la línea de Reynés (heredero del que fuera antes presidente colegial, José Vicente González, ahora mano derecha del cuestionado presidente del CGE) se presentó a las elecciones para en el último momento decir que el legítimo presidente era Reynés y que las elecciones convocadas no eran legales.
“El Sr. Reynés –continúa el comunicado oficial del COIBA que sigue presidiendo Rosa Hernández –perdió las elecciones en 2010 y pretende ocupar la presidencia mediante una resolución del Consejo General de Enfermería -dictada dos meses antes de que expire el mandato de la Junta de Gobierno”.
“Una resolución –añade –que excluye la candidatura de 2010, encabezada por la Sra. Hernández. De acuerdo con los Estatutos y la Ley Orgánica de Elecciones Generales, el único órgano que puede excluir o proclamar candidaturas es la Mesa Electoral”, dice, en alusión a un órgano con entidad jurídica propia e independencia.
“El proceso electoral de 2015, que concluye con la proclamación de la candidatura encabezada por la Sra. Hernández se inició no solo porque era obligatorio, ya que finalizaba un mandato sino también a petición de más de 1200 colegiados que supieron de la resolución del CGE que intentaba imponer a su candidato.”
Y añade: “El CGE dictó otra resolución rechazando la validez de ese proceso electoral bajo el argumento de que ya había un presidente, el que el propio CGE había designado, obviando que la Asamblea es soberana y su petición de elecciones era ineludible”, en alusión al movimiento desde Madrid para poner a Reynés.
“El Sr. Reynés –sigue el comunicado colegial –no se presentó a las elecciones pero sí lo hizo el Sr Buades, que también fue miembro, junto con el Sr. Reynés, de la Junta de Gobierno encabezada por el actual Secretario del CGE, Sr José Vicente González Cabanes”, que del colegio balear saltó al CGE en Madrid.
“Resultó –se destaca desde el colegio balear –extraño que el Sr. Buades no llevó a cabo ni un solo acto de campaña, ni una sola propuesta, ni una sola declaración ante los medios…” Buades desapareció en campaña. Dijo incluso que tenía que velar a un familiar enfermo. Pero no delegó en nadie de su candidatura.
“Ello nos llevó a sospechar –continúan desde el COIBA –que no pensaba presentarse a la votación, como así ha sido. Consideramos que presentar una candidatura con intenciones distintas a las que están establecidas es una falta de respeto a las reglas democráticas, a la profesión y a todos”. Y añaden:
“Estamos hartos de enredos que perjudican a una profesión que ya está pasando por momentos suficientemente difíciles. Desde ahora afirmamos con rotundidad que no entraremos en el juego de insidias de quienes no tienen un aval electoral, ni aceptan las reglas democráticas, ni la derrota en las urnas.”
“No dedicaremos nuestras energías a contestar panfletos y centraremos todo nuestro tiempo y nuestro esfuerzo en los objetivos que hemos propuesto en nuestro programa. Agradecemos a todos los que nos han dado respaldo, a todos los colegiados que querían hoy votar con ilusión y que han visto frustrada su intención”.
La presidencia cuenta “con ellos más que nunca, a través de grupos de trabajo y comisiones. El Colegio es grande, 5.600 colegiados que podemos hacer mucho por la profesión. Es nuestro empeño trabajar con los ciudadanos y las instituciones, con independencia de su signo político. La enfermería es una y para todos.”
Como el lector recordará Miquel Reynés, que perdió las elecciones hace cuatro años, se proclamó presidente colegial hace tres meses al obtener del Consejo General de Enfermería (órgano coordinador de los colegios españoles) una orden que destituía a Rosa Hernández y lo proclamaba a él presidente.
La orden del CGE derivaba de una asunción de competencias por parte de la entidad que preside Máximo González Jurado al desentenderse el Govern balear del recurso presentado por Reynés hace años contra la legitimidad de algunos de los miembros de la candidatura de ‘Xama’.
Aunque probablemente la historia no acaba aquí. Como no se han acabado los problemas del presidente del CGE, Máximo González Jurado, inmerso en diversas investigaciones judiciales, que van desde el presunto espionaje al director de PRNoticias a su presunta relación con la Gürtel andaluza.