Para el partido liderado por Jaume Font, Proposta per les Illes (Pi), la salud es el bien más preciado. Por lo tanto, es necesario invertir todos los recursos necesarios para garantizar la calidad de vida de las personas y fortalecer el estado de bienestar. El IB-SALUT se ha desarrollado desde finales del siglo pasado hacia una estructura que le da una atención médica de alta calidad a toda la población, tanto en primaria como en hospital, bajo las premisas de la universalidad, igualdad y libre. Sin embargo, desde 2008, con la crisis económica, el sistema de salud ha entrado en una fase de decadencia. Limitaciones económicas han dado lugar a reducciones de personal que descapitalizan el servicio. Se han detenido bruscamente las inversiones en infraestructuras y renovación tecnológica, ha aumentado el copago que, por primera vez, ha llegado a los jubilados y, más grave de todo, se ha acabado con la universalidad. Pese al cierre de camas, las plantas y quirófanos — durante periodos específicos — y no sustituirse las vacaciones, días de descanso, enfermos, excedencias o jubilaciones, el sistema aguanta por la inercia, esfuerzos y sacrificios de los profesionales además de por un magnífica estructura.
Se puede agravar si aumenta a la transferencia de recursos presupuestarios a la sanidad privada. La evolución de la población hacia una pirámide demográfica cada vez más envejecida, los costes adicionales inherentes a la doble y triple insularidad, los millones de turistas cada año, son factores que significan una tensión presupuestaria añadida al sistema de la salud de las Islas Baleares.
En este contexto, el rigor presupuestario es fundamental. Avanzar hacia un escenario de eficiencia profesional de la salud en todas las áreas. Debe establecerse un plazo máximo razonable obligatorio para las listas de espera, así como medidas de contingencia en casos de incumplimiento. El Pi apuesta por establecer una oficina de evaluación que reconsiderar la actual cartera de servicios, tanto para la introducción de nuevas prestaciones, así como para la eliminación de las ya existentes que se consideran anticuadas, incluyendo medicamentos, prótesis, implantes y material auxiliar. El Pi cree necesario incentivar el valor de los profesionales, principal pieza del sistema y más sensible. Deben restablecerse las plantillas de profesionales sanitarios acorde a las necesidades de los centros sanitarios en la actualidad.
Las propuestas de salud
1. Estudiar la libre elección de hospital en los casos de cirugía electiva.
2. Promover la cirugía ambulatoria, hospitalización y tratamiento en el hogar y el control telemático de los datos de los pacientes.
3. Reorganizar y reordenar el sistema de emergencia y emergencia para pacientes ambulatorios.
4. Definir claramente las áreas de actividad de la 061.
5. Reclamar del Estado la eliminación del copago farmacéutico para los pensionistas y, mientras no consiga, implementar la detección automática informatizada del límite anual de pago. Recuperar las horas de apertura de los centros