Por primera vez en la sanidad privada balear, la Policlínica Miramar ha desarrollado un procedimiento que permite, en una única intervención quirúrgica, operar un cáncer de mama y llevar a cabo, seguidamente, la reconstrucción del tejido mamario. La operación se ha llevado a cabo con resultados altamente satisfactorios, a cargo de los doctores Ángel López y Mariano Rovira, cirujanos plásticos de Policlínica Miramar y Son Espases.
Durante los últimos años se ha desarrollado con éxito la cirugía conservadora, que permite evitar la mastectomía, si bien este tipo de intervención se halla indicada en tumores relativamente pequeños, o bien en otros de mayor tamaño pero en pacientes con un volumen mamario considerable. Otra alternativa a tener en cuenta es la técnica del ganglio centinela.
Paralelamente, a nivel quirúrgico, se han desarrollado las técnicas de reconstrucción mamaria, de las que existen hoy en día un amplio y diverso abanico que abarca un gran número de pacientes Como asegura el doctor Mariano Rovira, el objetivo de estos procedimientos quirúrgicos “es que proporcionen resultados óptimos. Si se ofrece a una paciente la alternativa de la reconstrucción mamaria, espera tener una mama reconstruida nada más finalizar la operación, con ambos pechos absolutamente simétricos, aunque ello exija en ocasiones practicar pequeñas cirugías complementarías”.
Proceso de ruptura
En este mismo sentido, el doctor Ángel López incide en que la reconstrucción mamaria “es una opción que permite evitar el proceso de ruptura con la imagen corporal que la mujer tenía antes de la intervención.
Desde el punto de vista psicológico, eso es muy importante. Tengamos en cuenta que una mastectomía es un proceso mutilador, queramos o no. Las pacientes quedan desfiguradas y eso afecta a su esfera social, a su percepción de ella misma, y a su relación con el entorno”.
La operación de reconstrucción inmediata del tejido mamaria llevada a cabo en Policlínica Miramar satisfizo plenamente las expectativas. Con anterioridad, este tipo de intervención había sido practicado en el Hospital Son Espases, también por parte de este mismo equipo de especialistas.
Según el doctor López, la calidad de los resultados obtenidos con esta técnica “es muy elevado, ya que se trata de una técnica muy natural, y en la mayoría de los casos es suficiente con una única intervención”.
La operación se fundamenta en la utilización de tejido de la propia paciente. Como explica el doctor Rovira, “se obtiene un trozo de piel de la espalda asociada a la musculatura, y a partir de esta base muscular se añade, posteriormente, gras, bien procedente del abdomen o de otras partes del cuerpo en que esta grasa esté localizada”.
El proceso postoperatorio exige cinco o seis días de ingreso hospitalario, en función del drenaje o de los efectos que haya causado la quimio primaria.
Lógicamente, como apunta el doctor López, “pueden surgir circunstancias que retrasen la recuperación inmediata, pero no es en absoluto una intervención de riesgo.
Eso sí, se trata de una intervención larga, de entre cuatro y cinco horas de duración, que exige la aplicación de anestesia general. Con un control anestésico correcto, no tiene por qué aparecer la más mínima complicación”.
Técnicas de reconstrucción
En la actualidad, la medicina moderna cuenta con una gran diversidad de técnicas de reconstrucción mamaria.
Algunas son más sencillas desde el punto de vista logístico, como la incorporación de material sintético a través de la colocación de una prótesis.
El problema estriba, según López, en que “siempre que se introduce este tipo material en el organismo se genera una reacción en el cuerpo, y ello puede originar dificultades, como contracturas, infecciones o el endurecimiento del implante. En cambio, la ventaja de estas intervenciones es que no resulta necesario conseguir tejido de otras partes del cuerpo”.
Por otro lado, durante los últimos tiempos ha cobrado fuerza la utilidad de la mastectomía preventiva como fórmula para descartar el desarrollo de un cáncer de mama en mujeres que reúnen determinados factores de riesgo, entre ellos los antecedentes familiares de esta enfermedad.
A este respecto, el doctor Rovira alerta que la mastectomía preventiva “solo puede llevarse a cabo en la sanidad pública cuando se detecta la existencia de una mutación de determinados genes. En los hospitales privados, en cambio, la paciente tiene la posibilidad de someterse a esta operación en el caso de que piense que tiene elevadas posibilidades de desarrollar un cáncer en el futuro”.
De entrada, cualquier mujer con cáncer de mama es candidata a acceder a la operación de la reconstrucción inmediata de la mama. El doctor López opina que “todas las pacientes del mundo deberían contar con esta opción, pero lamentablemente hay hospitales sin equipo de medicina plástica o con recursos multidisciplinarios a los que acogerse”.
En este sentido, López anima a las pacientes a aprovechar las opciones que, en este sentido, ofrecen Son Espases y la Policlínica Miramar.