Redacción
Las enfermeras defienden un modelo asistencial para el paciente crónico centrado en la persona, que satisfaga sus necesidades y las de su familia, y no gire únicamente en torno a la enfermedad. Los modelos de atención a la cronicidad también deben contemplar la creación de rutas asistenciales diferenciadas para los pacientes con enfermedades crónicas avanzadas. Estas son las principales conclusiones de la sesión-debate celebrada recientemente en el Col•legi Oficial d’Infermeria de les Illes Balears, que lleva por título “Retos y propuestas en la gestión de la cronicidad: Programa de atención al paciente crónico avanzado”.
“La gestión de los pacientes crónicos es el gran reto de nuestro sistema nacional de salud, ya que supone actualmente el 70% de su presupuesto”, ha explicado Isabel Román, enfermera gestora de casos del Hospital General. Además, el 80% de las consultas de Atención Primaria y el 60% de los ingresos hospitalarios están relacionados con las patologías crónicas. Esta situación “es insostenible” y más pronto que tarde se hará imposible dar respuesta a las necesidades de la población con la actual estructura de nuestro sistema sanitario, apunta Román.
El aumento de los factores de riesgo como son la diabetes, la hipertensión, la hipercolesterolemia, la obesidad, la vida sedentaria y la mala alimentación, está provocando un importante incremento de las patologías crónicas. Si además tenemos en cuenta el envejecimiento de la población y el aumento de la expectativa de vida, el actual modelo asistencial no da respuesta a este nuevo perfil de usuario. Este modelo hospitalocéntrico favorece la fragmentación, los reingresos y las visitas frecuentes a urgencias de los pacientes con patologías crónicas. El 50% de las camas de la red hospitalaria estén ocupadas por personas mayores de 65 años, que en su mayoría no son enfermos agudos sino crónicos. Es un modelo que va en detrimento de la Atención Primaria que es el eje donde debe pivotar el Sistema.
“La Cronicidad hay que definirla con 4 «C»: es un problema Creciente, son enfermedades Conocidas, son un reto Complejo y en un sistema en Crisis “, explicó Román ante el público en el Col•legi d’Infermeria. Para afrontar estos retos, Román apunta al modelo pilotado en el Hospital General basado en la atención integral al paciente crónico avanzado. Este tipo de paciente presenta una gran complejidad y elevada morbilidad, con pérdida importante de su autonomía y gran dependencia, lo que supone dar respuesta a necesidades complejas de cuidados orientados hacia la continuidad asistencial, el trabajo en equipo multidisciplinar y la gestión de recursos sociales.
El Programa de Atención al Paciente Crónico Avanzado que se está llevando a cabo en el Hospital General contempla el ingreso directo desde el domicilio del paciente, de cama a cama, sin la necesidad de pasar por urgencias de Hospitales de agudos. “Este es un gran paso porque los enfermos crónicos, que son muy frágiles y complejos, no necesitan pasar por un hospital de agudos, consumir sus recursos ni ocupar un espacio que –en el mejor caso- es solo un puente de paso hacia un hospital de Media Estancia”, explica Román.
El cambio del modelo asistencial, centrado en la persona y no en la enfermedad, se cimienta sobre la estratificación de la población con patologías crónicas en función de su complejidad. En base a ello, la Enfermera Gestora de Casos Sociosanitaria (EGCSS) es quien asegura la continuidad asistencial a través de la coordinación entre los distintos niveles asistenciales (enlace) y favorece la transición al domicilio de forma coordinada y planificada.
Para finalizar, Román hizo hincapié en la urgencia de este cambio de enfoque para mejorar la eficacia y sostenibilidad del sistema, para dar respuesta a esta nueva demanda y reorientar la asistencia hacia la fragilidad y la cronicidad.
Esta urgencia fue confirmada también por la Subdirectora de Atención a la Conicidad del Servicio de Salud, Angélica Miguélez, que insistió en la necesidad de conseguir una Atención Primaria potente que ofrezca una Atención domiciliaria resolutiva y eficaz a los pacientes con enfermedades crónicas complejas.