P.- ¿Cuáles son las principales patologías que afectan a la voz?
R.- Las patologías más comunes son los nódulos, pólipos, quistes, edema de Reinke, hemorragias, parálisis, sulcus, ulceras y granulomas, que suelen localizarse en el tercio medio de la cuerda vocal.
P.- ¿A quiénes afectan: niños, adultos, mujeres, hombres…?
R.- Pueden afectar a todos, pero tienen mayor afectación las mujeres y los niños, son los dos grupos de población con más riesgo de sufrir disfonías por las características físicas, sus cuerdas vocales y la laringe, ya que en las mujeres es más pequeña que en los hombres y en los niños más delicada. En cambio, en los hombres son más frecuentes los pólipos derivados de pequeños traumatismos por un abuso o mal uso de la voz que dan lugar a hemorragias reducidas. Estas lesiones son, como los nódulos, habitualmente benignas, pero algunas por sus características sí requieren de una operación.
P.- ¿Cómo se detectan?
R.- Las señales que muestran alguna alteración incluyen, por ejemplo, cuando la gente nos oye con dificultad, no se nos entiende en sitios ruidosos, la voz altera nuestra vida personal y social, nos sentimos desplazados de las conversaciones, el problema de voz afecta a nuestro rendimiento laboral, cuando sentimos que necesitamos tensar la garganta para hablar o nos molesta, cuando notamos carraspeo, sequedad… en estos casos seguramente hay algún tipo de alteración que deberíamos de consultar.
P.- ¿Qué terapias existen para mejorarlas?
R.- La terapia de la voz se compone de pautas de higiene vocal, relajación e impostación vocal. Los ejercicios incluyen técnicas de respiración, de vocalización y reeducación de la voz. El tratamiento de los trastornos de la voz varía dependiendo de la causa. La mayoría de los problemas de la voz pueden ser tratados con éxito si se diagnostican temprano.
P.- A parte de para tratar las patologías ¿estas terapias o técnicas pueden ser de ayuda a aquellas personas que necesiten la voz para trabajar como cantantes, docentes, gente que tenga que hablar en público: abogados, periodistas, conferenciantes…?
R.- Por supuesto, estas técnicas se utilizan también para todos los profesionales que comunican ya que con estas técnicas los demás nos entienden mejor debido a que en ocasiones nuestra respiración no es la adecuada o nuestra voz es monótona, el habla es muy lenta o rápida, por abuso vocal o mal uso. Es importante, por tanto, que estos profesionales las tengan muy presentes.
P.- ¿Cómo hay que cuidar de la voz?
R.- Para que nuestra voz funcione de manera adecuada debemos conseguir un ritmo respiratorio adecuado y no tensar; relajar los músculos orofaciales; evitar los ambientes ruidosos para no forzarla, no hablar por encima de nuestras posibilidades, hidratarnos a través del consumo de agua para evitar la resecación, evitar los ambientes secos y aires acondicionados; y por ultimo evitar toser o carraspear, así como forzar la voz. En definitiva, cuando existe disfonía durante más de 10 días o incluso 2 semanas hay que acudir al otorrino para que lo explore y reeducar logopédicamente si existe un mal uso o abuso vocal. La voz es nuestro instrumento de comunicación y es muy valioso para que los demás nos entiendan así que hay que cuidarlo.