Horacio Bernal
Desde el pasado jueves Menorca dispone de tres nuevas oficinas del Registro de Voluntades Anticipadas, que se suman a la ya existente en Es Mercadal, con el objetivo de facilitar el acceso al servicio a las personas interesadas en formalizar su testamento vital y reducir la espera de tres meses que se produce actualmente para poder tener cita en el Registro.
Se trata de una iniciativa pionera en el conjunto de las Illes Balears, dado que Menorca es la única isla donde se puede formalizar este documento en los centros de salud. En concreto, los residentes en la isla ahora tienen la opción de tramitar el testamento vital en la Unidad Básica de Salud de Es Mercadal, en el Centro de Salud Canal Salat de Ciutadella y en los centros Verge del Toro y Dalt Sant Joan de Maó, en los que personal de enfermería dedicará una tarde a la semana a atender a los usuarios. Josefa Juan Jurado continúa como responsable de la oficina de Es Mercadal; se suman como responsables Joana Moll y Antonio Muñoz, en Ciutadella; Francisca Orfila en el centro Dalt Sant Joan, y Margarita Garriga en el centro Virgen del Toro.
Todas las personas interesadas en hacer el testamento vital deben pedir cita directamente en los respectivos centros o unidades básicas de salud de cada pueblo —de manera presencial o por teléfono— y, desde allí, serán derivadas a alguna de las cuatro oficinas del Registro de Voluntades Anticipadas que existen ahora en el conjunto de la isla. Las citas para este servicio no se pueden tramitar ni por Internet ni a través del teléfono general de cita previa.
La oficina del Registro de Voluntades Anticipadas de Menorca se abrió en julio de 2010 en las mismas dependencias del Hospital Mateu Orfila y en marzo de 2014 se trasladó a la Unidad Básica de Salud de Es Mercadal. Se trata de un servicio que se ofrece a las personas mayores de 18 años y con plena capacidad para declarar unilateralmente el alcance de los cuidados o de los tratamientos que tienen que recibir o el destino de sus órganos cuando se den circunstancias que no les permitan manifestar su voluntad. El testamento vital es un documento completamente confidencial y se puede modificar o rectificar en cualquier momento y tantas veces como se quiera. Durante estos seis años, se han elaborado más de 500 documentos de voluntades anticipadas, la mayoría de los cuales corresponden a personas de entre 45 y 70 años.
Una vez rellenados y firmados, todos los documentos pasan a formar parte del Registro de Voluntades Anticipadas insular y autonómico, quedando así a disposición de todos los médicos, hospitales y centros de salud, a fin de que puedan conocer y cumplir la voluntad expresada por el paciente sobre el tipo de cuidados y tratamientos que quiere recibir al final de su vida.