Juan Riera Roca /
La presidenta de las Illes Balears, Francina Armengol, ha visitado hoy el Servicio de Radiología del Hospital Universitario Son Espases (HUSE), reconocido como el mejor de todo el Estado por la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM), para su proyecto de “Seguridad en Radiología”.
Francina Armengol ha dado la enhorabuena a los profesionales del Servicio dirigido por el radiólogo Joan Palmer, por el reconocimiento de la SERAM y ha destacado la calificación y el alto nivel tecnológico de que dispone el hospital de referencia de las Illes Balears, sus medios y profesionales.
“Es una demostración de la buena gestión del hospital, lo que implica más eficiencia y garantías para los pacientes. El Servicio de Radiología es un ejemplo de la apuesta de este Govern por la calidad del servicio de salud, que necesita una actualización y mejora constante” ha expresado Armengol.
“El servicio público de salud es prioritario para el Ejecutivo, que ha aumentado un 7% el presupuesto destinado a la Conselleria para 2017. Sin embargo -ha remarcado- no contamos con los recursos que merecemos como comunidad y que equipararían este servicio a los del resto Estado.”
Y ha añadido la primera autoridad política balear en su visita a estas instalaciones, que “es por eso que estamos muy decididos a reclamar un mejor sistema de financiación, que, de una vez por todas, garantice una inversión justa en las Illes Balears en materia de salud”.
Acompañada por la consellera de Salud, Patricia Gómez; el director general del IBSalut, Juli Fuster, y la gerente del HUSE, Dolores Acón, la presidenta ha recorrido este Servicio y ha podido conocer el funcionamiento del mamógrafo con tomosíntesis, incorporado recientemente.
Este nuevo aparato permite detectar más tumores de mama que una mamografía convencional y, además, reducir la tasa de recitación de pacientes para la realización de estudios complementarios. Se trata de la última tecnología disponible en el mercado, entra las más adelantadas del mundo.
La consellera Patricia Gómez ha destacado que la tomosíntesis “supone un gran avance para el diagnóstico del cáncer de mama. Este mamógrafo ofrece una imagen en 3D. La mayor precisión reduce el número de repeticiones de pruebas, disminuye las dosis de radiación y evita biopsias innecesarias”.
Desde el pasado mes de marzo se han hecho 2.427 exploraciones con este mamógrafo. Esta sección, además de este mamógrafo digital con tomosíntesi, también dispone de un mamógrafo digital, un ecógrafo, una mesa de biopsia, una resonancia magnética y un sistema de biopsia de mama por resonancia.
Joan Palmer, jefe de Radiología; Antoni Graner, radiólogo de la Sección de Mama; Sergio Maestro, supervisor de Área de Imagen de Enfermería; Carmen Macarro, supervisora de Enfermería de Radiología, y Jesús Navarro, enfermero del Servicio, han acompañado y guiado la visita de autoridades.
El cáncer de mama es la neoplasia (enfermedad oncológica) más frecuente y la principal causa de muerte por cáncer entre las mujeres. La mamografía es la prueba diagnóstica básica en cualquier estrategia de detección precoz del cáncer de mama y para el estudio de la patología mamaria.
Hasta un 20-30% de los cánceres de mama pueden no detectarse en una mamografía. La densidad mamaria es un factor relevante que afecta a la sensibilidad de la prueba que oscila entre un 98% en mamas grasas hasta un 40% en mamas densas.
La tomosíntesis permite estudiar la mama, evitando la superposición de tejidos que dificulta la interpretación de la mamografía clásica en 2D. Esta nueva tecnología permite ver la mama en 3 dimensiones, tal cual es en la realidad. De ahí que sean menos necesarias las reconfirmaciones.
En caso de que se detecte una lesión, se puede saber con más precisión la forma, los contornos, el tamaño, la ubicación y la extensión exacta dentro de la mama. Está especialmente indicada para mujeres por debajo de los 50 años, y para las que presentan glándulas mamarias más densas.