Juan Riera Roca /
La Unidad de Asesoramiento Psicológico Infantil de la Universitat de les Illes Baleares (UIB) busca niños de 8 a 12 años para que participen en un proyecto de investigación para evaluar la eficacia y la viabilidad de un programa de realidad virtual para el tratamiento del miedo a la oscuridad.
El miedo a la oscuridad es uno de los miedos evolutivos más estables y frecuentes en los niños. Puede acabar por ser una fobia específica situacional. La fobia a la oscuridad, o más concretamente el miedo de dormir solo y en la oscuridad, es entre las diez miedos más comunes entre los 7 y los 13 años.
La Unidad de Asesoramiento Psicológico Infantil del Servicio Universitario de Atención Psicológica de la UIB ha iniciado un proyecto de investigación que tiene como objetivo analizar la viabilidad y la efectividad de un programa que da un paseo con unas gafas de realidad virtual por una casa a oscuras.
Este programa para el tratamiento del miedo de la oscuridad en niños ha sido desarrollado por PSIOUS, una compañía tecnológica española y estadounidense que provee de soluciones tecnológicas para la salud mental y que ha desarrollado una plataforma de realidad virtual.
Esta plataforma está destinada al tratamiento de fobias y miedos a través de exposiciones simuladas. Para llevar a cabo este proyecto, los investigadores de la UIB necesitan niños de 8 a 12 años con miedo a la oscuridad para someterse a este juego, visitando una casa virtual y superando unas pruebas.
A los niños seleccionados para participar en este proyecto se les aplicará un protocolo de evaluación en el que los padres deberán rellenar varios cuestionarios, informes y registros de observación. Los terapeutas también aplicarán diversos instrumentos de evaluación al niño.
El objetivo es conocer sus características personales y comportamentales además de su «nivel de miedo» de la oscuridad. Tras la intervención, un protocolo de evaluación más reducido servirá para evaluar la eficacia postratamiento. Este protocolo volverá a aplicarse tres meses después.
Durante dos semanas, los niños participarán en sesiones de entrenamiento diarias de una hora de duración. Los padres recibirán instrucciones para saber cómo actuar en casa y cómo deben llevar a cabo juegos y situaciones que ayuden a reforzar el entrenamiento.
Desde el punto de vista del niño, la intervención se plantea como un juego para el que será necesario utilizar unas gafas especiales, en las que se acopla un teléfono móvil. El objetivo del juego es acumular puntos explorando diferentes dependencias de una casa.
La casa virtual tiene diferentes niveles de luminosidad y en dos condiciones ambientales: noche plácida o noche más o menos tormentosa. Dentro del juego el niño tendrá un amigo: Psicobot, un robot flotante que le dará todas las instrucciones, que le animará y al que podrá acudir cuando sienta miedo.
Las sesiones de juego están jerarquizadas de manera que siempre se irá de situaciones fáciles a más difíciles. Psicobot y el terapeuta irán dando misiones al niño gradualmente, y él tendrá que mover por la casa, en diferentes condiciones, para alcanzarlas y con ello superar diversas situaciones.
El objetivo es que vaya superando cada situación, venciendo el miedo, incrementando puntos, autoestima y confianza. Los profesores Mateu Servera y Joan Miquel Gelabert son los responsables de este proyecto. Para poderse debe rellenarse un formulario y la UIB y contactará con la familia.
El acceso al formulario se encuentra en https://docs.google.com/a/salut.org/forms/d/1kY2bhoBhESJg5RYRS1qpE79Unj6_9CX4Bs6Z2iahv3s/viewform?edit_requested=true