Juan Riera Roca /
El ácido hidroxioléico, molécula patentada como ‘Minerval’, descubierta por los investigadores Pablo Escribá y Xavier Busquets, catedráticos de la UIB, ha recibido un nuevo e importante apoyo, en este caso financiero: la Unión Europea subvenciona la investigación para el desarrollo de un posible fármaco anticancerígeno con 6,1 millones de euros.
Mientras parte de la prensa aún pone en duda el trabajo de los profesores Escribá y Busquetes por su implicación en una investigación por una presunta venta irregular del producto (proceso en el que por ahora todos los testigos niegan haber hecho compras o pagos irregulares) el Minerval recibe más apoyos de la comunidad científica.
El desarrollo del Minerval como fármaco anticancerígeno, actualmente en fase de ensayo clínico, se beneficiará del programa Horizonte 2020 de la UE, que destinará 6,1 millones para financiar la fase 2b de esos ensayos, dado el éxito de los primeros resultados. El equipo de Escribá y Busquets coordinará una compleja red internacional de investigación.
Lipopharma, la compañía que desarrolla el producto, tiene ahora que negociar con 12 partners de diferentes países el desarrollo de los objetivos del consorcio internacional que permitirá seguir con la investigación y que contará con la participación de los profesionales e investigadores de varios hospitales y con 200 pacientes.
Lipopharma, con base en el ParcBIT de Mallorca, lidera este consorcio en el que participan hospitales y empresas biotecnológicas de la Unión Europea, Israel y Estados Unidos.
Entre los 12 socios –con los que se inicia ahora una negociación que durará no menos de tres meses –se cuentan cuatro hospitales, tres universidades y cinco empresas.
En esta fase del proyecto merece especial atención la aportación clínica de los hospitales, de nuevo conocimiento de las universidades y de desarrollo de productos y herramientas de las compañías biotecnológicas implicadas, así como de diversos especialistas: desde médicos oncólogos a epidemiólogos y otras especialidades de este ámbito.
En esta fase participan los hospitales Royal Marsden de Gran Bretaña; el Instituto Gustave Roussy de Francia; el Instituto Neurológico Carlo Besta de Italia, y el hospital Hadassah UMC de Israel. Las tres universidades que aportan sus investigadores son la Universitat de les Illes Balears, la de Newcastle (Inglaterra) y la de Salerno (Italia).
La subvención para continuar con el desarrollo del Minerval cobra un valor especial no solo por la cuantía económica sino también por el hecho excepcional que significa que suponga que a un solo proyecto se dedique el 10 por ciento de lo que destina la UE a iniciativas científicas de esta índole, en entornos además altamente competitivos.
Pese a las críticas (ajenas al mundo científico, que respalda el trabajo de Escribá y Busquets en la medida de los resultados por ahora obtenidos) el Minerval no ha dejado de cumplir las expectativas. En junio fue presentado con éxito por una especialista del Hospital Vall d’Hebron, en el último gran congreso mundial de oncología de la ASCO, en Chicago.