A falta de poco más de un año para la finalización de la actual legislatura autonómica, el director general del Servei de Salut, Juli Fuster, repasa los retos que su departamento tiene todavía pendientes antes de que se agote el presente período de gobierno. La progresiva implementación de la estrategia de la cronicidad, la modernización de la Atención Primaria, el inicio efectivo de las obras en Son Dureta y la gratuidad del parking de Son Espases son algunos de estos desafíos.
P.- Lamentablemente, hay que empezar la entrevista hablando de la lacra de la violencia contra el personal sanitario, que recientemente se ha cobrado dos nuevas víctimas en Balears…
R.- En efecto, es un tema que nos preocupa y que, como usted dice, supone una auténtica lacra que merece nuestra condena más enérgica. Tanto es así que la Administración autonómica se persona como acusación pública en todos estos casos. Hemos de pensar que dada la consideración de autoridad que ostentan los profesionales de salud, las penas por estos comportamientos son especialmente duras. Ahora bien, sin querer minimizar el problema, también hay que contextualizarlo. El sistema sanitario realiza más de dos millones de contactos anuales con usuarios, y prácticamente todos ellos se saldan sin ningún tipo de incidente. En cualquier caso, desde el Ib Salut hemos aplicado medidas concretas y efectivas, como el sistema de alerta que se ha introducido en todos los ordenadores de Atención Primaria.
P.- Hablemos de infraestructuras. Ya se ha iniciado la primera fase del plan director del Hospital de Manacor…
R.- La modernización de este centro hospitalario suponía un gran reto para nosotros. Tengamos en cuenta que el Hospital de Manacor se construyó para prestar servicio a un contingente poblacional de 90.000 personas que, veinte años más tarde, ha pasado a ser de casi 140.000. A ello hay que añadir el inevitable deterioro de las instalaciones provocado por el paso del tiempo. Hace dos legislaturas, con el anterior pacto de gobierno, se proyectó una reforma del hospital que se consensuó con los profesionales, e incluso se cerró la adjudicación del proyecto arquitectónico. Lamentablemente, el siguiente Govern del PP no consideró oportuno ejecutar la actuación, de manera que nada más iniciada la legislatura tuvimos que recuperar el plan y actualizarlo a las nuevas circunstancias y necesidades, consultando otra vez con los profesionales. Hemos empezado con la unidad de Urgencias, y pronto empezará la segunda fase, que afecta a la resonancia magnética.
P.- La estrategia de la cronicidad es uno de los grandes pilares de la legislatura actual…
R.- Y no solo eso, sino que también supone un ejercicio de planificación sanitaria. Afortunadamente, vivimos mucho más tiempo que décadas atrás. Sin embargo, el sistema de salud está orientado a enfermedades agudas, y no crónicas. Casi todos los hospitales para agudos cuentan ya con unidades de crónicos, y este es también el objetivo que guía actuaciones como el futuro complejo sociosanitario de Son Dureta, el de Verge del Toro, en Menorca, o el pabellón J de Can Misses.
P.- Ha hecho usted referencia a Son Dureta. ¿En qué punto se halla ahora mismo este proyecto?
R.- De momento, se ha diseñado el proyecto de demolición de los edificios que, siguiendo las consignas de los ingenieros, decidimos que debían ser derrumbados, a causa de sus problemas estructurales. Este es el caso del edificio Materno Infantil y el de consultas externas, además de algún otro inmueble auxiliar. En cambio, el edificio semicircular se podrá aprovechar, ya que, además de ser válido, cuenta con un estimable valor arquitectónico y patrimonial, además de sentimental. El proceso de concurso para ejecutar las demoliciones ya se ha completado y estamos a punto de realizar la adjudicación. Y también muy pronto se licitarán las nuevas construcciones.
P.- En Atención Primaria se ha proyectado un plan de renovación de infraestructuras especialmente ambicioso. ¿Qué actuaciones contempla?
R.- El objetivo era volver a situar el primer nivel asistencial en el lugar que le corresponde, después de que durante la legislatura anterior fuera el sector asistencial que tuvo que encajar un mayor número de recortes. Ahora, sin embargo, se ha incrementado el presupuesto de Atención Primaria en un 27%, y ello sin contabilizar las obras que hay previstas. Por supuesto, se han aumentado las plantillas, y se ha diseñado un plan de infraestructuras que ha comenzado a aplicarse en los equipamientos más deteriorados. En Palma, el nuevo centro de Bons Aires sustituirá a s’Escorxador, que se ha quedado obsoleto, y temporalmente reemplazará al de Camp Rodó mientras duren las obras de reforma proyectadas ahí. Los trabajos comenzarán en un plazo breve de tiempo. Sin dejar Palma, hay que hacer mención a la actuación planificada en Son Ferriol y a la posibilidad de que el centro de salud de Pere Garau, que ha llegado ya al límite de su capacidad, sea reubicado en el edificio de los antiguos cines Metropolitan. En cuanto a la part forana, se construirán los nuevos centros de Pollença y Artà, además de las unidades básicas de Calonge y Sant Joan, sin dejar de lado, en Eivissa, el nuevo centro de salud de Can Misses.
P.- La alternativa que el Govern ha puesto en marcha para mitigar el déficit de profesionales en la sanidad pública es la convocatoria de oposiciones. ¿Qué resultados espera?
R.- Esperamos que mejore sustancialmente la situación de los profesionales y, por ende, la calidad del sistema sanitario. Venimos de una larga etapa de sequía total en este aspecto, ya que las últimas oposiciones se convocaron en 2008, también con un Ejecutivo de pacto. Desde entonces, además de las limitaciones impuestas por la ley Montoro, la necesidad de consolidar las plantillas se topó con el desinterés del Govern en la siguiente legislatura. La consecuencia de todo ello ha sido la elevación de los niveles de interinidad y eventualidad, que ahora se mejorarán sustancialmente gracias a la convocatoria de oposiciones. Aun así, hemos de reconocer que hay un déficit en determinadas especialidades, y no solo en Balears sino en todo el Estado. Es el caso de los pediatras, los radiólogos, los anestesistas e incluso los médicos de familia. Esta es una realidad que hay que gestionar de la mejor manera posible.
P.- El parking de Son Espases, ¿será gratuito cuando finalice la legislatura, tal como se comprometió el Govern?
R.- Confío que este tema se resolverá satisfactoriamente. Siempre hemos dicho que es un objetivo de legislatura, pero no representaba un objetivo fácil. Por una parte, el parking está adjudicado durante treinta años a una empresa privada que, lógicamente, no está dispuesta a renunciar al beneficio económico que le corresponde; y, por otro lado, se trata de una adjudicación realizada mediante un contrato de concesión que está regulado de manera muy estricta y rígida en las normativas europeas. Aun así, el proceso está muy avanzado, y espero que la gratuidad del aparcamiento sea una realidad, no solo en el caso de Son Espases, sino también en Can Misses.
P.- ¿Qué razones han impulsado a optar por la creación de una empresa pública para la gestión del servicio de emergencias?
R.- Desde el primer momento mantuvimos que un tema tan sensible como el transporte sanitario urgente debía estar en manos públicas, y no en las privadas. Eso exigía crear una empresa y adquirir una nueva flota de ambulancias. De nuevo, he de utilizar la expresión de que todos hemos salido ganando, porque ahora contamos, prácticamente, con las mejores ambulancias de Europa. Tanto es así que continuamente nos llegan peticiones para que sean exhibidas en ferias, ya que todo el mundo quiere conocer de primera mano su funcionamiento y estar al tanto de sus prestaciones.
P.- Las listas de espera, ¿evolucionan tal como se esperaba?
R.- No me gusta comparar con la situación anterior, pero es inevitable. Nos encontramos con unas cifras inadmisibles, con más de 2.500 personas que acumulaban una demora de más de seis meses para ser operadas, y más de 20.000 usuarios que esperaban más de sesenta días para acudir a una consulta. El plan de choque que trazamos en su momento ha deparado buenos resultados. En consultas, hemos pasado de 20.000 a 3.000 pacientes en demora de más de sesenta días, y en la actividad quirúrgica, algo más de 300 pacientes se hallan en espera durante más de medo año. Ahora bien, no nos conformamos. Y por eso continuamos aportando recursos, y muy pronto se recuperará el decreto de garantía de demora, cuya aprobación se producirá antes del verano, como han anunciado la presidenta del Govern y la consellera de Salut. Por otro lado, se ha mejorado en transparencia. En la pasada legislatura, las listas de espera no se publicaban; ahora, no solo se publican, sino que los usuarios pueden consultarlas por Internet.
P.- De todas maneras, parecen registrarse problemas de demora en servicios concretos, como el de Radiología del Hospital de Manacor, según ha denunciado recientemente el principal partido de la oposición…
R.- Lo que la oposición debería hacer es esconderse y no mencionar el tema de las demoras. Para demoras, las que había el día 1 de julio de 2015, cuando finalizó su etapa en el Govern. Francamente, es increíble que digan esto, y sobre todo que lo digan en referencia al Hospital de Manacor, donde cuando entraron a gobernar, en 2011, encontraron un proyecto adjudicado que decidieron no ejecutar. En cualquier caso, quiero trasladar un mensaje de tranquilidad a la población de Manacor. Es cierto que existe un déficit de radiólogos. Nunca hemos pretendido negarlo. Pero cualquier radiografía urgente, como una radiografía para un diagnóstico oncológico, por ejemplo, se lleva a cabo de manera inmediata. Y en cuanto a las radiografías programadas estamos llegando a acuerdos con Sant Joan de Déu y Creu Roja.
Entrevista al Dr. Juli Fuster, director general del Servei de Salut de les Illes Balears. Programa Salut i Força a Canal 4 Televisió, dirigit i presentat per Joan Calafat.
1 comentario. Dejar nuevo
Es lamentable que todos los políticos utilicen es mismo idioma, «con nosotros mucho mejor», el otro era muy malo, la única realidad es que Baleares sigue ocupando los últimos puestos en cuanto a financiación sanitarias, en A. Primaria siguen sin sustitutos, sabe que pasa Dr. Juli, que los profesionales se han rendido, aceptan como normal situaciones aberrantes, han logrado que no tengan ya capacidad de protesta.
Usted no sera nunca recordado como benefactor de la Primaria. Ahhhhh y la señora consejera tampoco. Como mucho de enfermería