Juan Riera Roca /
Las Illes Balears participarán en la estrategia estatal para el control y posible erradicación de ofidios (es decir, serpientes), dentro del plan que el Estado y las comunidades aprueban han aprobado en forma de una hoja de ruta con vigencia indefinida. La conferencia sectorial de Medio Ambiente, que reúne el Ministerio de Transición Ecológica y las comunidades autónomas, ha aprobado, la estrategia de gestión, control y posible erradicación de ofidios invasores en las Islas. Estas serpientes llevan entrando de forma inadecuada en las Islas desde hace ya varios años, hasta el punto que en 2013 se decidió crear una red de alerta para detectar estas entradas.
Se trata de un documento en el cual han trabajado conjuntamente las Illes Balears y Canarias a raíz de la presencia de serpientes en estos territorios insulares, más frágiles y con una biodiversidad más sensible precisamente por este status. Ambas comunidades han ido implantando medidas de captura y control de ofidios invasores y en esta experiencia se ha basado parte de la estrategia que liderará el Ministerio de Transición Ecológica y que tiene una vigencia indefinida con una revisión cada seis años.
Esta estrategia tiene como objetivos establecer medidas de carácter preventivo y de control de las vías de entrada; diseñar un programa de detección temprana e intervención rápida; desarrollar medidas de gestión, control y posible erradicación, sensibilización y educación.
Para Balears, el documento propone mantener en la mínima densidad posible las poblaciones de las serpientes de agua (Natrix amasa) en la Serra de Tramuntana, reducir la población de la serpiente de herradura (Hemorrhois hippocrepis) en Eivissa y Mallorca, y promover la erradicación, a medio plazo, de la serpiente blanca (Rhinechis scalaris) en Formentera mediante un mayor esfuerzo en las capturas.
También, aumentar el conocimiento sobre la biología de las especies, tanto de ofidios como las que pueden resultar afectadas por estos, el seguimiento de las poblaciones de serpientes y la implantación de medidas de bioseguridad en las vías de entrada complementan los hitos marcados por la estrategia. Con respecto a las medidas de bioseguridad en los canales de introducción accidental de ofidios, se establecen inspecciones en puertos y aeropuertos, además de cuarentenas y protocolos de importación y exportación.
La estrategia recoge que se promoverá la coordinación con las autoridades competentes tanto en el origen como en el destino para establecer sistemas de control y buenas prácticas en el transporte de olivos y otras especies ornamentales que puedan ser el vector de entrada de los ofidios en los territorios insulares.
Precisamente en el caso de los olivos se tendrán que establecer medidas de cuarentena o de tratamiento antes de su introducción en las islas y se tendrán que incluir las garantías pertinentes de la empresa de origen sobre los tratamientos previos al embarque que disminuyan la posibilidad de transportar serpientes.
Desde 2003 se produce la entrada accidental de ofidios peninsulares en las Illes Balears. En Mallorca, donde ya había constancia de dos especies, se han detectado tres más, y en las Pitiüses, donde no había ninguno, se han detectado la serpiente de herradura (Hemorrhois hippocrepis) tanto en Eivissa como en Formentera y la serpiente blanca (Rhinechis scalaris) en Formentera.
Esta introducción de ofidios en la Comunidad Autónoma se ha relacionado directamente con la introducción de olivos desde el sur de la Península en tráileres, para usarlas en jardinería ornamental. La estrategia de gestión, control y posible erradicación de ofidios invasores en las Illes plantea también acciones para facilitar la detección temprana de ejemplares de estos reptiles maximizando el uso y el funcionamiento de la Red de Alerta, creada en el 2013, para facilitar la coordinación y la comunicación entre las administraciones.
El Govern ha sido el primero en implantar medidas de control de ofidios en las Illes Balears, que, en el caso de Eivissa, ya hacía dos años que impulsaba el Consejo Insular, con la colocación de trampas. La Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca ha impulsado, además, el estudio de la superficie invadida y el grado de invasión y la investigación de datos de la biología de las especies (ciclo biológico, alimentación, impactos potenciales).
La experiencia adquirida desde el 2016, cuando la Consejería inició el programa, ha permitido aumentar su eficiencia, personal y esfuerzo, obteniendo datos sobre la biología y ecología de las especies, incluyendo las presas y llevando a cabo una evaluación, de densidad de la población de lagartija pitiüsa (Podarcis pityusensis) en relación con la presencia de serpientes. Desde entonces han sido capturadas por parte del Gobierno 2.993 serpientes, a las que se tienen que sumar las de particulares y las de los consejos.