Juan Riera Roca /
A lo largo del año 2018 se ha localizado un solo nido de avispa asiática, según han informdo fuentes de la Univesitat de les Illes Balears (UIB). La colaboración ciudadana es imprescindible -señalan los expetos- para el control de esta especie invasora y el otoño es un momento clave para detectar nuevos nidos de avispas asiáticas.
La avispa asiática o Vespa velutina se detectó por primera vez en Mallorca en 2015, cuando un apicultor informó de la presencia de una avispa que no conocía en su apiario, ubicado en el valle de Sóller. Aquel año, con mucho esfuerzo, se retiró el primer nido.
Desde entonces, la especie se ha expandido por la sierra de Tramuntana y ha afectado a un total de diez municipios de la isla. Entre 2015 y 2017 se han localizado y retirado un total de treinta nidos.
Según Irene Garneria, técnica de Protección de Especies de la Conselleria, durante la primavera de este año se ha llevado a cabo una campaña con trampas muy intensiva, que ha supuesto la eliminación de un total de nueve reinas fundadoras con la colocación de 580 trampas, priorizando la zona de Bunyola-Sóller-Deià y la zona perimetral, según la previsión de expansión de la especie.
Este año solo se ha localizado, hasta ahora, un nido de avispa asiática en el núcleo urbano de Sóller y, por eso, el director general de Espacios Naturales y Biodiversidad, Miquel Mir, ha celebrado la buena noticia y también ha agradecido la labor realizada por todo el equipo de control de la avispa invasora, ya que, según él, «los métodos utilizados a la hora de hacer las capturas han hecho daño a la especie, aunque todavía no se pueda declarar como erradicada».
Durante los meses de otoño (de septiembre a noviembre) es cuando la avispa asiática se encuentra en el punto álgido de desarrollo. Es cuando más avispas hay buscando alimento y, por tanto, son más fáciles de detectar.
La doctora bióloga de la UIB Mar Leza ha explicado que vivimos unos momentos clave y que «no se puede bajar la guardia, además de seguir trabajando para perseguir su erradicación».
De hecho, Leza ha explicado que cada nido puede llegar a acoger 8000 individuos, y que cada ejemplar puede cazar una media de unas 25 abejas; en los meses de mayor presión de caza, potencialmente podrían cazar 12 millones de abejas, que supondrían unas 3000 colmenas.
Es por ello que la doctora ha destacado la importancia de este control y ha señalado que la campaña de capturas es vital para conservar la apicultura sostenible de las Islas y los ecosistemas en general.
Por otra parte, se ha editado un cartel que recoge gran parte de las especies de avispas de las Islas Baleares con ilustraciones ayudan a identificar y conocer de cerca esta especie y, según la profesora de investigación del IMEDEA (CSIC-UIB) Anna Traveset, lo que se pretende es que «ayude a que la ciudadanía no tenga un mal concepto de las avispas, ya que, además de cumplir una función polinizadora importante, también ayudan a un control biológico natural».
Desde la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca y la UIB, se hace un llamamiento a la ciudadanía para que informe de cualquier detección de esta especie. La colaboración ciudadana ha sido clave desde el primer momento, dado que buena parte de los nidos se han podido detectar gracias a avisos de apicultores y particulares.
Se puede contactar con el Servicio de Protección de Especies por correo electrónico, en la dirección