JUAN RIERA ROCA / Ayer miércoles se inauguró el ‘XIII Encuentro e-Salud y telemedicina: la transformación digital de la salud’, dirigido por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) en el marco de los cursos de verano de la Universidad Menéndez Pelayo (UIMP).
El encuentro está organizado por la Unidad de Investigación en Salud Digital del ISCIII y los directores son Fernando Martín, director del Programa de Salud Digital, Cronicidad y Cuidados del ISCIII, y Adolfo Muñoz, jefe de la citada Unidad y se está celebrando en Santander.
A lo largo de tres días, el encuentro tratará la innovación en la atención sanitaria, la integración y continuidad de los cuidados y la implicación del profesional sanitario y el paciente en el manejo de las herramientas de salud digital y el reto del acceso a estos recursos.
También se están tratando los retos tecnológicos, la interoperabilidad, el uso de big data, app y wearables, la protección de datos y la participación del paciente serán protagonistas. La cita ha sido inaugurada por la directora del ISCIII, Raquel Yotti.
Yotti ha recordado que la telemedicina y la salud digital en el ISCIII «es un área prioritaria y ahora está tomando una nueva dimensión que nos lleva más allá, enlazando la transformación digital en toda su extensión y dirigiéndola especialmente a la atención a la cronicidad y a los cuidados en salud».
Según Fernando Martín, los desarrollos de salud digital en España generan gran interés y mantienen mucha actividad, aunque cree que aún «faltaría desarrollar una estrategia nacional consensuada por los distintos actores y formar parte de más alianzas internacionales».
Mejorar en formación en competencias digitales por parte de los profesionales sanitarios, acreditar programas educativos y adaptar marcos formales para evaluar más y mejor las experiencias en salud digital son algunas de sus recomendaciones.
Martín considera que la salud digital «puede ser conductora de muchos de los cambios que precisa la medicina: diagnóstico precoz, terapias más precisas, nueva clasificación de enfermedades, creación de perfiles de riesgo, generación de modelos predictivos, aumento del autocuidado de la salud…».
Adolfo Muñoz ha insistido en esta idea y ha añadido más ideas: «El paciente exige más celeridad en los servicios y los profesionales sanitarios, que deben ser la guía, deben formarse para utilizar las nuevas tecnologías y lograr que los pacientes las puedan aprovechar».
La última petición de los directores del curso es también compartida: «Las organizaciones sanitarias deben aprender a integrar mejor la salud digital». El ISCIII lleva años de experiencia con la Unidad de Investigación en Salud Digital y el reciente Programa de Salud Digital, Cronicidad y Cuidados.