JUAN RIERA ROCA / Las enfermeras del Hospital de Manacor llevarán un chaleco identificativo cuando estén preparando medicación para evitar interrupciones y errores. El Hospital pone en marcha esta actuación en el marco de la estrategia de seguridad del paciente para incrementar la seguridad, mejorar los entornos de trabajo y disminuir los errores de medicación evitables.
A partir de ahora, el personal de enfermería podrá hacer uso de un chaleco identificativo cuando prepare medicación. Esto permitirá que el resto del personal, los pacientes y los familiares los identifiquen. De este modo se espera que se les preste una consideración especial y se pretende reducir el número de interrupciones. Con esta medida se incrementa la seguridad de las personas ingresadas en el hospital.
La evidencia científica indica que durante mientras se prepara y se administra la medicación, las interrupciones son la causa principal de error. En el ámbito internacional, entre el 10 y el 20% de los acontecimientos adversos que ocurren dentro de un hospital son errores de medicación. Datos como estos han llevado a los profesionales de enfermería a diseñar estrategias.
En el caso de España, según el Estudio nacional sobre los efectos adversos ligados a la hospitalización (ENEAS), el 4% de las personas ingresadas a los hospitales experimentan acontecimientos adversos por medicamentos (AAM); de ellos, un 34,8% son evitables. Los AAM son una causa de morbilidad, mortalidad, prolongación de estancias hospitalarias, reingresos e incremento del gasto sanitario.
Atendiendo la magnitud de esta circunstancia, disminuir los AAM es una prioridad tanto para el hospital como para los profesionales y las profesionales. El personal de enfermería tiene un papel especialmente relevante, dado que llega a invertir hasta un 40% de la jornada laboral en preparar y administrar medicación.
Los expertos en gestión de riesgos apuntan que para hacer reducir la incidencia de AAM es imprescindible mejorar los entornos de trabajo; y una de las causas que influyen más en los AAM son las distracciones e interrupciones constantes a los que se somete el personal de enfermería: reclamos de los pacientes, familiares y otros profesionales, llamadas telefónicas…