JUAN RIERA ROCA / La Conselleria de Salud y Consumo distribuirá 144.100 dosis de vacunas contra la gripe estacional en las Illes Balears en la campaña de vacunación contra la gripe 2019-2020. Se estima que el año pasado unas 15.000 personas padecieron esta enfermedad en las Illes Balears.
De las 144.100 vacunas 67.000 serán para las personas mayores de 65 años con factores de riesgo, trabajadores sanitarios, cuidadores de enfermos, trabajadores de servicios esenciales y mujeres embarazadas; 77.000, con otra composición más específica, para personas mayores de 65 años.
Se han previsto 100 dosis de vacuna para personas con alergia al huevo. En estos momentos, ya se han repartido 108.610 vacunas entre los centros de salud de las Illes Balears. En Mallorca se han distribuido 85.030 dosis; en Menorca, 9.000 dosis, y en las Pitiüses, 14.580. El resto de dosis se distribuirán en función de necesidades.
El objetivo es mejorar la cobertura de todos los colectivos de riesgo, especialmente de la gente mayor o con enfermedades crónicas, dado que la gripe puede descompensar sus patologías, ocasionarles un ingreso hospitalario o incluso derivar en complicaciones muy graves y causar la muerte.
El personal médico y de enfermería se vacuna y recomienda la vacunación, a la vez que contribuye a mejorar las coberturas, con su acción, además de protegerse a ellos mismos, protegen a los pacientes que atienden y a la comunidad en general de una enfermedad que, en algunos casos, puede ser mortal.
La vacunación es una acción por el bien común. Desde la Conselleria de Salud y Consumo se quiere transmitir la idea de que la vacunación, además de un acto individual para la protección propia, es muy importante para evitar contagiar a personas que pueden tener complicaciones graves con la gripe.
La campaña de difusión se dirige a mayores de 65 años, a enfermos crónicos, a embarazadas, a los cuidadores de enfermos, niños y gente mayor, a los profesionales sanitarios y al personal que ofrece servicios de respuesta rápida a la comunidad, como bomberos, policía, etcétera.
Para aumentar la cobertura de la vacunación de la gripe entre la población se informará y concienciará a la población con la distribución de pósteres en los centros de salud, hospitales, ayuntamientos y otros lugares de gran afluencia, y también con anuncios en la radio, la televisión, la prensa.
También se ha diseñado una web específica (grip.caib.es) para informar sobre esta campaña. Este año se personaliza el mensaje centrado en la población de riesgo mediante el envío de más de 262.475 SMS dirigidos a este colectivo. Se informar a los profesionales sobre la vacunación antigripal.
Se ha previsto también mejorar el sistema de registro del procedimiento de vacunación, la difusión de los resultados del programa entre los profesionales sanitarios para que tengan información actualizada sobre el desarrollo de la campaña y puedan atender así, mejor a los colectivos de riesgo
Los colectivos de riesgo establecidos son los siguientes: mayores de 65 años; adultos y niños con enfermedades crónicas relacionadas con el sistema pulmonar, el sistema cardíaco, las insuficiencias respiratorias y el asma, la diabetes y las enfermedades renales; también enfermos inmunodeprimidos.
También se recomienda de forma especial la vacuna a pacientes con obesidad mórbida, enfermos afectados por algún tipo de deterioro cognitivo (síndrome de Down, demencias, etc.), pacientes con un implante coclear (dispositivo auditivo) o a la espera de recibirlo y los niños prematuros en los primeros dos años de vida.
También, a las mujeres embarazadas. Este año se continúa recomendando la vacunación a las embarazadas en cualquier mes de la gestación. La vacunación de las madres protege también a los futuros recién nacidos. Se aconseja la vacuna a ciudadanos de cualquier edad que viven en una institución.
Como en las otras campañas, se repartirán vacunas en centros penitenciarios, residencias geriátricas y de discapacitados, casales de mayores y mutuas de trabajadores. Se recomienda muy especialmente la vacunación a los colectivos que pueden transmitir la gripe a las personas de los grupos de riesgo.
Es el caso del personal sanitario, el personal de las residencias de ancianos y de residencias de discapacitados, los cuidadores de enfermos con patología crónica o quienes conviven con ellos, y los que ofrecen servicios de respuesta rápida a la comunidad o trabajan en dicho ámbito (policía, bomberos y protección civil), así como los educadores de guarderías de 0 a 5 años.
Las personas interesadas en vacunarse pueden pedir cita previa al Servicio de Salud telefoneando al 971 43 70 79.
Durante la campaña de vacunación 2018-2019 se vacunaron 115.215 habitantes de Illes Balears (93.352 en Mallorca, 8.215 en Menorca, 12.913 en Eivissa y 735 en Formentera). 73.822 eran mayores de 65 o más años (59.545 en Mallorca, 5.578 en Menorca, 7.566 en Eivissa y 262 en Formentera).
En cuanto a los menores de 65 años incluidos en colectivos de riesgo, se vacunaron 41.392 (33.807 en Mallorca, 2.637 en Menorca, 4.687 en Eivissa y 293 en Formentera). Las autoridades sanitarias hacen especial hincapié en que no solo los colectivos de pacientes frágiles deben vacunarse, sino todos aquellos incluidos en lo señalado.
La red centinela de la gripe está integrada por 34 médicos centinelas (27 médicos de familia y siete pediatras) y está operativa de octubre a mayo. Estos profesionales trabajan en 28 centros de salud de Mallorca (trece en Palma y quince en la Part Forana), tres de Menorca y tres de Eivissa.
Estos centinelas comunican semanalmente a la Dirección General de Salud Pública y Participación los casos de gripe detectados y, además, recogen muestras para analizarlas y poder caracterizar los virus gripales circulantes. De este modo, se puede realizar un seguimiento detallado de la evolución de la gripe entre la población y aplicar las medidas preventivas y asistenciales que sean necesarias.
La información recogida por los sistemas de vigilancia epidemiológica permite estimar que en la temporada de actividad gripal 2018-2019 en las Illes Balears hubo unos 15.000 casos de gripe. Los pacientes con sintomatología de la gripe pueden acudir a los centros de salud y, fuera del horario laboral, a los PACs.
Los centros de salud y los PAC ofrecen una asistencia más rápida y evitan los desplazamientos a los hospitales. La gripe no se cura con medicamentos, pero pueden tomarse medidas para mitigar sus síntomas: hacer reposo, beber mucho líquido (agua y zumos) y tomar antipiréticos son las más recomendadas.
También hay que extremar las medidas higiénicas para evitar su transmisión, como por ejemplo lavarse las manos, taparse la boca al toser, procurar no reutilizar los pañuelos, etc. En cualquier caso, los enfermos no deben tomar antibióticos si no es por indicación del médico, puesto que la gripe es un proceso vírico contra el que los antibióticos no son eficaces.
