Y no es una simple intuición, o un punto de vista. Así lo avalan numerosos estudios científicos, absolutamente creíbles y rigurosos, que han abordado la influencia de las mascotas en el bienestar psicológico, emocional e incluso físico de los seres humanos.
En este sentido, merece todos los elogios la iniciativa del Hospital Son Llàtzer de hacer posible que los pacientes ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) puedan recibir la visita de sus perros, dentro del programa denominado ‘Dogspital’, un proyecto que cuenta con la implicación de un capacitado y competente equipo de profesionales sanitarios, educadores caninos y veterinarios.
De momento, Son Llàtzer ha implantado esta opción solamente en el caso de estos usuarios, pero los responsables del centro no descartan que el programa se amplíe sucesivamente al resto de las unidades del centro hospitalario, en función de la acogida y los resultados que se obtengan.
Esta no es la primera vez que la sanidad pública lleva adelante una actuación de estas características. De hecho, el programa se aplica desde julio de 2017 en el Hospital Can Misses, gracias a la iniciativa de la Unidad de Seguridad del Paciente del Área de Salud de Eivissa y Formentera y la cooperación del Colegio de Veterinarios de Balears y del Club Agility.
También el Hospital Joan March desarrolla un programa propio desde enero de 2017, llamado ‘Benvinguts Animalons’.