JUAN RIERA ROCA
Un estudio desarrollado por invetigadores de la Universitat de les Illes Balears (UIB) sugiere que la ingesta insuficiente de vitaminas D, C y B12 y los minerales hierro y zinc se asocia a una incidencia o mortalidad más elevada del SARS-CoV-2.
La falta de conocimientos sobre los mecanismos biológicos del coronavirus SARS-CoV-2, así como la ausencia de vacunas y tratamiento efectivos contra la enfermedad que provoca, el COVID-19, hacen necesario reestudiar el sistema inmune.
Entre los factores determinantes se encuentra la nutrición, dado que la ingesta correcta de nutrientes esenciales tiene un impacto beneficioso en el sistema inmunitario y la protección contra las enfermedades infecciosas.
El Grupo de Investigación en Nutrigenómica y Obesidad de la UIB y del Centro de Investigación Biomédica en Red en Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN), dirigido por el doctor Andreu Palou, ha publicado un estudio al respecto.
Aparecido en la revista científica «Nutrientes», analiza la influencia de los nutrientes esenciales en la prevención del COVID19, considerando las seis vitaminas (E, D, C, B6, B9 y B12) y los cuatro minerales (hierro, zinc, cobre y selenio).
El estudio de los investigadores de la UIB ha analizado el estado nutricional de estos nutrientes a diez países europeos a partir de la literatura científica publicada y ha estudiado la relación con los indicadores epidemiológicos del COVID19.
Los investigadores destacan que los países con el peor perfil de ingesta de estos micronutrientes (España, Italia, Bélgica, Reino Unido y Francia) son los que han recibido el golpe más fuerte de la pandemia, por lo esa relación existe.
En resumen, los resultados sugieren que, en el conjunto europeo, la insuficiente ingesta de las vitaminas D, C y B12, y los minerales hierro y zinc, se asocia a una mayor incidencia o mortalidad causada por el COVID19.
Los investigadores también han señalado la detección de individuos con un alto riesgo genético de mostrar niveles bajos de nutrientes específicos permitiría diseñar pautas de nutrición personalizadas para promover la salud.
Los autores también son miembros del Laboratorio de Biología Molecular, Nutrición y Biotecnología de la UIB, del Instituto de Investigación Sanitaria de las Islas Baleares (IdISBa) y de Alimentómica, empresa de base tecnológica de la UIB.