Una vez finalice la formación de los profesionales se prevé que se puedan hacer en toda Atención Primaria: centros de salud, puntos de atención continuada (PAC) y servicios de urgencias de atención primaria (SUAP) y también por medio de los equipos del SAMU-061. El Ibsalut ha adquirido 850.000 test rápidos 450.000 ya recibidos.
Los centros de salud donde ya se han empezado a aplicar estos test son los de Llucmajor e Inca, en Mallorca; la unidad volante de atención al coronavirus (UVAC) ubicada en el centro de salud Dalt Sant Joan, en Menorca, y la UVAC básica del centro de salud de Es Viver, en Ibiza, según informa el Ibsalut.
El test rápido de antígenos permite diagnosticar el virus en pacientes sintomáticos en los primeros cinco días de infección, cuando la carga viral es más alta. Disponer de los resultados en quince minutos permite actuar con más celeridad a la hora de cortar la cadena de transmisión y frenar la transmisión comunitaria.
Este test diagnóstico detecta los llamados antígenos, unas proteínas específicas presentes en el virus. Se realiza introduciendo los escobillones vía nasofaríngea (igual que las PCR) para extraer las muestras. Con estos tests el Ibsalut dispone actualmente de dos tipos de pruebas diagnósticas además de las PCR:
Mientras que la PCR y el test rápido de antígenos detectan la carga viral, las serologías detectan la presencia de anticuerpos; es decir, la reacción defensiva del organismo ante la infección. Estos últimos son los más indicados a la hora de detectar si un paciente ha pasado la enfermedad.