JUAN RIERA ROCA
Cifre récord de muertos en esta segunda ola del COVID19 en Baleares. De ayer a hoy el registro de defunciones general se engrosa con ocho personas, a las que hay que añadir otro fallecido de una residencia de ancianos, cómputo que por alguna razón no se hace de forma simultánea. Con estas muertes ya son 351 las vidas truncadas demasiado pronto en las Islas por la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2.
Otro indicador que arroja un resultado puntual negativo es la tasa de positividad, el porcentaje de pruebas PCR positivas en un día, que aunque se estudia a dos semanas vista para establecer una tendencia, lleva ya algunos días por encima del 5%, que es la barrera que las organizaciones médicas aconsejan no superar. Hoy jueves está en un 6,94%, ayer en un 5,59%.
El dato aparentemente más fácil de comprender, el de nuevos infectados, no sube. Hoy se han registrado 169 nuevos casos positivos de COVID19, uno menos que ayer, muy lejos de los no más de 50 diarios que han de registrarse de media para que la situación sea buena, algo por encima de la media de 100 de las últimas semanas y lejos, eso sí, de los 300 y 500 nuevos casos diarios de finales del mes de agosto.
En los hospitales la presión no sube, pero tampoco baja. Hoy jueves hay 158 ingresos activos en planta, dos más que ayer. Y 38 en UCI, dos menos que ayer, aunque esa noticia no siempre es buena porque puede corresponderse con alguno de los ocho fallecidos. El dato que siempre es positivo es el de los enfermos curados: Hoy, otros 130, de los que 117 estaban en sus casas y 13 estaban hospitalizados.
Entre los ancianos residentes en establecimientos para la tercera edad, los casos positivos de COVID19 son hoy 60 (5 menos que ayer), 54 de los cuales están hospitalizados (uno más que ayer). Han muerto 174 y en estos momentos hay 47 trabajadores de este sector con la infección en curso. Entre los profesionales sanitarios hay hoy 53 casos activos (2 más) y 178 en vigilancia por proximidad con positivos (12 más).
