Los alumnos del Grado de Medicina de la UIB se examinan en tres turnos, respetando las medidas sanitarias. Uno de cada 3 alumnos apostará por la Medicina de Familia
Quedan solo unos minutos para que empiece el examen de la asignatura de Medicina Familiar para los alumnos de quinto curso de la Facultad de Medicina.
Porque el tiempo pasa volando y ya estamos encontrándonos en la recta final de la que será pronto primera promoción de estudiantes que finalicen el Grado de Medicina de la UIB.
Salut i Força es testigo de las extraordinarias medidas de seguridad sanitaria a la hora de organizar los exámenes presenciales en la Facultad. El decano, Dr. Miquel Roca, lo tiene todo controlado, sabe, al igual que la vicedecana y tertuliana de nuestro programa de televisión, la Dra. Margalida Gili, que los deberes están hechos. La seguridad sanitaria es máxima. Quedan escasos instantes, los profesores de la asignatura de Medicina Familiar, los doctores Caterina Vicens e Ignasi Ramírez, atienden a este medio.
Ignasi Ramírez reconoce que no ha sido un curso normal: “más que nada hemos mantenido las distancias de seguridad e higiene, dentro de un curso presencial porque hay mucha evidencia científica. No olvidemos que los alumnos que estudian presencialmente tiene un 30-33% más de éxito que los que lo hacen online.
Siempre que sea posible hay que mantener la presencial. Los alumnos están motivados y preparados, por el trabajo previo realizado.
La doctora Caterina Vicens explica que “siempre hemos tenido el aforo correcto y, si alguna vez había de más, algunos alumnos seguían la clase de forma telemática.
Son alumnos que han demostrado interés por la asignatura y han asistido a dos días de prácticas”.
La importancia de la asignatura
La UIB ha apostado por esta asignatura: “Uno de cada tres estudiantes de Medicina acabará siendo médico de familia. Algunos por su vocación y otros porque hay más plazas que otras especialidades y tienen más fácil el acceso.
Muchos alumnos lo ven como su primera opción. En esta Facultad se le ha dado mucho peso a esta asignatura con 6 créditos y prácticas.
Aquí se ha apostado por ello”, reconoce Vicens. ”Le damos énfasis a la relación terapéutica entre médico y paciente, la empatía, porque eso dará mejor resultado.
Necesitan habilidades de comunicación. En el seminario de nuestra asignatura lo hemos hecho de consulta telefónica, con el rigor que toca, con sus características”, explica la profesora.
En palabras del Dr. Ramírez, “es una especialidad muy importante.
Cuando nosotros estudiamos no existía esta asignatura y todavía algunas facultades no la tienen. Los alumnos deben disfrutar y formarse con esta asignatura.
Sobre todo, es importante el factor humano. Hay efecto social sobre esa persona y son cuestiones psíquicas.
Tratar a los pacientes que tenemos delante como personas, no como un número. Debemos generar seguridad por teléfono o en persona cuando sea atendido en su centro de salud”.