La mascarilla no volverá a ser obligatoria en espacios abiertos en Baleares a partir del próximo sábado, como se había filtrado durante la jornada de hoy martes, pero sí que el Govern balear, tal como la consellera de Salut, Patricia Gómez ha reiterado en varias ocasiones, recomienda su uso en la calle, mientras que sigue obligado en espacios cerrados.
Pese a que por tercer día consecutivo los indicadores epidemiológicos señalan un descenso en el número de contagios diarios de COVID19 en Baleares, el Govern ha anunciado una batería de restricciones para frenar esta cuarta ola de la pandemia que, además, tiene ya por protagonista a la variante Delta (india) del coronavirus SARS-CoV.2, ya la que tiene mayor incidencia.
En las últimas 24 horas se han detectado en las Islas 493 nuevos contagios en las Islas, que con ser más de diez veces los que se registraban antes de esta nueva oleada, son 137 menos que los 630 del domingo y aún una cifra inferior a los 752 del sábado, siendo el viernes el último día en que el número de contagios fue mayor que el de la víspera.
Patricia Gómez, consellera de Salud, ha recordado también hoy que «nos encontramos ante una nueva ola, que afecta de forma primordial a la población joven» y ha destacado que «la ocupación de camas por pacientes de COVID19 es del 3,65% en Balears y la de cuidados intensivos, del 14,56%», pese a que ese último indicador no debería superar el 10% en la nueva normalidad.
Esta cuarta ola se está caracterizando por afectar especialmente a los menores de 30 años -aún no vacunados y con mayores índices de incumplimiento de las medidas de seguridad- lo que de momento se traduce en una menor ocupación de plazas hospitalarias (ver gráficos en esta página) gracias a que los grupos de más riesgo están ya mayoritariamente vacunados.
Sin embargo, los altísimos (aunque en los últimos tres días decrecientes) indicadores de contagios siguen preocupando al Govern que la semana pasada ya anunció que se reduciría la actividad hospitalaria quirúrgica con ingreso no urgente para reservar camas y UCIs ante una eventual avalancha (que no tiene porqué llegar) de casos COVID con necesidad de ingreso.
Otras medidas que se están preparando para gestionar esta nueva ola (ver gráficos sobre estas líneas) incluyen un endurecimiento de las sanciones a quienes incumplan normativas que hacen referencia al ocio inicialmente legal o a los famosos botellones. Por ello, un Consell de Govern extraordinario aprobará mañana una batería de medidas anti COVID19.
De este modo, este martes 20 se ha de aprobar endurecer las sanciones por la práctica de botellón, limitar los encuentros sociales nocturnas en las islas donde se registre mayor incidencia de casos, reducir los aforos en restauración así como eventos deportivos y culturales.
«La reanudación de la normalidad que representa la finalización del estado de alarma no puede suponer el abandono radical de las medidas elementales de prevención y contención de la pandemia, todo con el fin de evitar el riesgo de nuevas oleadas de la enfermedad que obliguen de nuevo a la toma de medidas más drásticas para contenerla», advierten desde el Govern.
Se recuerda que la declaración de situación de emergencia sanitaria que dispuso la Organización Mundial de la Salud continúa vigente y que en el momento actual «nos encontramos ante una nueva ola, que afecta de forma primordial a la población joven de la Comunidad Autónoma y también de los visitantes, a pesar del avance de la vacunación contra el contagio del SARS-CoV-2».
Esta expansión se ha visto favorecida, por una parte, por el aumento de movilidad y social que ha acompañado al inicio del periodo estival, lo que ha dado lugar a un incremento notable de los contactos sociales en entornos de riesgo, con un escaso seguimiento de las medidas de prevención, contribuyendo así a la generación de episodios de super-diseminación de contagios.
Además, esta situación ha coincidido con la irrupción y expansión en el territorio de la variante Delta (B.1.617.2) del SARS-CoV-2, la cual es probablemente más transmisible que la variante Alfa. En las Islas Baleares, esta variante se ha ido incrementando de forma muy significativa hasta llegar a alcanzar un 85% del total de muestras analizadas.
La presidenta de las Illes Balears, Francina Armengol, ha presidido el lunes 19 de julio la Mesa de Diálogo Social en el Consolat de Mar para analizar la situación actual de la pandemia de COVID19. Le acompañan la consellera de Hacienda y Relaciones Exteriores, Rosario Sánchez; el conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela; la consellera de Asuntos Sociales y Deportes, Fina Santiago, y la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Mae de Concha. Por parte de los agentes sociales están presentes la presidenta de CAEB, Carmen Planas; el presidente de PIMEB, Jordi Mora; el secretario general de UGT, Lorenzo Navarro, y el secretario general de CCOO, José Luis García.
La presidenta de las Illes Balears, Francina Armengol, también se ha reunido hoy lunes, en esta ocasión por videoconferencia, con los responsables de los consells insulars, el presidente de la FELIB y el alcalde de Palma para abordar asuntos relacionados con la pandemia de COVID19. En la reunión han participado por vía telemática la presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera; la presidenta del Consell Insular de Menorca, Susana Mora; el presidente del Consell Insular de Eivissa, Vicent Marí, y la presidenta del Consell Insular de Formentera, Alejandra Ferrer. Además, intervienen el alcalde de Palma, José Hila, y el presidente de la FELIB, Antoni Salas.