La portavoz adjunta del Grupo Parlamentario Popular, Nuria Riera, ha afirmado, tras la Junta de Portavoces, que las nuevas medidas que está adoptando el Govern Armengol ante el aumento de contagios de COVID19 en Baleares durante las dos últimas semanas, “vuelven a castigar al sector de la restauración y a quienes han cumplido”, ya que “al hacerlos cerrar una hora antes se vuelve a castigar a los negocios”.
“Además, continuamos sin efectivos suficientes de policía, a lo que se le suma la chapuza de la creación de los ‘agentes covid’, que no son agentes de autoridad y no pueden controlar los botellones y las aglomeraciones”, ha dicho la portavoz adjunta y ha añadido que “mientras vemos como sigue habiendo botellones, se vuelve a castigar a quienes han cumplido, han adaptado sus negocios y han seguido los criterios que ha impuesto el Govern».
Y ello, en alusión a muchas de las medidas anti COVID del Govern balear, que el sector de la restauración de Baleares ha seguido a rajatabla, “a pesar de ser improvisados e incoherentes”. Por lo cual la popular Nuria Riera ha manifestado que desde su grupo, el principal de la oposición el Parlament, “pedimos que se adopten medidas con seguridad jurídica, en base a criterios sanitarios y con informes jurídicos que las avalen”.
Por otra parte, Riera ha afirmado que “la situación actual de Balears, tanto en el ritmo de contagios, como en sus consecuencias en la temporada turística y en la economía, constatan la necesidad de que la presidenta Armengol salga del Consolat y comparezca en el Parlament”. La diputada del PP ha señalado que “lamentamos la imputación de la directora general de Salud, pero también pedimos máximo respeto a las decisiones judiciales.»
Y ha añadido que “rechazamos las conductas incívicas de algunas personas jóvenes y no tan jóvenes, que favorecen que se propague el virus, pero también constatamos que la justicia, una vez tras otra, pone en evidencia las chapuzas jurídicas del Govern Armengol y tumba sus decisiones”. “El fin no justifica los medios”, ha dicho la ‘popular’ al respecto de todo el asunto de los confinamientos de viajeros sospechosos de estar infectados.
Nuria Riera ha señalado que “la justicia demuestra que la figura jurídica elegida para confinar a los jóvenes era incorrecta, sin garantías individuales, igual que ha ocurrido en Madrid con el estado de alarma. No cuestionamos que se tomen medidas, sino la forma de adoptarlas y la falta de seguridad jurídica”, algo que se hubiera evitado, advierte, de no haber sido el Gobierno central tan políticamente intransigente:
“Si el Gobierno central hubiera hecho caso a la reivindicación del Partido Popular y hubiese elaborado una ley de pandemias, habría una cobertura jurídica. De igual modo que si aquí la presidenta Armengol escuchase al PP balear y tomase las decisiones en base a criterios sanitarios y no políticos, quizá no habría estas chapuzas políticas”, ha dicho Riera.
Riera ha insistido en la importancia de la vacunación y ha afirmado que “la única solución es vacunar, vacunar y vacunar”. “Estamos a 21 de julio y seguimos muy lejos de vacunar a todo el mundo por mucho que el Govern repita que se está acabando la vacunación. Solo con la pauta completa estaremos protegidos y tendremos la inmunidad de grupo, por lo que pedimos al Ejecutivo que pida más vacunas y coordine mejor la vacunación”