El informe elaborado por la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, a partir de datos facilitados por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 del Gobierno central, refleja que un total de 666 personas han fallecido en Baleares este año entre el colectivo de usuarios que forman parte de las listas de espera de la Ley de dependencia.
Dentro de este grupo de pacientes desaparecidos, 300 se hallaban pendientes de que la Administración emitiera la correspondiente resolución en torno al reconocimiento del grado específico de dependencia. En el resto de casos (366 personas) se trata de usuarios a los que ya se les había reconocido el derecho a cobrar la prestación.
De esta manera, la lista de espera de la dependencia en Baleares había quedado reducida, según datos actualizados este pasado mes de noviembre, a algo más de 2.200 personas, con un decrecimiento del 10,3 por ciento a lo largo del último año. En cambio, la cifra de pacientes beneficiados con las prestaciones y servicios asociados a la dependencia ha aumentado, en este mismo periodo, un 5,7 por ciento.
A nivel nacional, una cifra cercana a las 43.400 personas (concretamente, 43.381) han muerto en el transcurso de este año mientras se hallaban en situación de espera para percibir la paga asignada por la legislación sobre dependencia.
La entidad que se ha encargado de elaborar este informe, la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, culpa a la “burocracia” que caracteriza a los procedimientos de tramitación de estas ayudas del elevado número de expedientes que permanecen sin una resolución definitiva y que, en algunos casos, todavía no han sido culminados en el momento en que se produce el fallecimiento del usuario.