La Asociación de Diabéticos de las Islas Baleares (ADIBA) ofrece atención integral a enfermos que sufren la enfermedad y a sus familias; una atención que subvenciona el IRPF Social que promueve la Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes. El 10 % de la población sufre diabetes. «Crea un impacto a la persona, cambia tu estilo de vida porque afecta a nivel psicológico. Es una enfermedad que son 365 días al año, 24 horas», dice Adela Villalonga, trabajadora social que ha estado al servicio de la entidad.
Entre los proyectos de intervención integral subvencionados, están los campamentos de educación diabetológica que ofrece ADIBA a las familias de menores entre 6 y 17 años y que les ayudan a convivir con la diabetes. «Están entre iguales, con más gente que tiene este problema o que ya ha tenido un problema similar y les puede ayudar a ver cómo se enfrentan».
Así lo explica Laura Ventura, la pediatra-endocrina de la asociación. «Muchos a esta edad suelen experimentar negación. Tienen un poco de rechazo al tratamiento, a veces se ven diferentes porque constantemente tienen que contar la comida, mirarse el azúcar, y se ven diferentes a otros niños. Creo que supone un cierto problema añadido en la época de la adolescencia».
ADIBA ofrece espacios de ocio educativo en los que se combinan las actividades propias de campamentos con actividades de educación diabetológica. «Tenemos gimcanas donde mezclamos pruebas más típicas de campamento con otras sobre la diabetes y tienen que contestar preguntas, algún tipo de juego.
»También, marcar en un dibujo de un cuerpo donde se pueden medir y pinchar y representar posibles situaciones cotidianas de la diabetes, por ejemplo ir a cenar con sus padres a un restaurante, controlar una hipoglucemia que le pase a un participante y ver cómo los otros reaccionan…», comenta Xisco Torà, director de ocio y tiempo libre de los campamentos de la entidad.
