La presidenta Armengol comparte los aspectos clave de la nueva Ley de la Ciencia con representantes del sector de la investigación y el desarrollo. Investigadores de diferentes ámbitos han participado en una jornada sobre los retos de futuro de la ciencia y la investigación en las Baleares
La nueva Ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación de las Illes Balears, que el Govern aprobó como proyecto de ley el pasado lunes, fue ayer el tema de debate en una jornada organizada para poner en común los nuevos caminos que abre la ley y los retos de futuro de la ciencia y la investigación en las Balears.
La presidenta Armengol, acompañada por el conseller de Fondos Europeos, Universidad y Cultura, Miquel Company, participó en este acto, en el Archivo del Reino de Mallorca y en el cual hubo un coloquio con la gerente de la Asociación Balear de Empresas de Software, Internet y Nuevas Tecnologías (GSBIT), Tona Pou y el rector de la Universitat de les Illes Balears (UIB), Jaume Carot.
Participaron también la investigadora del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA), Ananda Pascual, y el director del Sistema de Observación y Predicción Costero de las Illes Balears (SOCIB), Joaquim Tintoré. La presidenta destacó, ante estos y otros interlocutores, que el futuro de nuestras islas tiene que ir “inexorablemente ligado a la innovación”.
Tal y como indicó, la nueva ley aporta un marco normativo amplio para hacer “crecer todo aquello que hace referencia a la economía del conocimiento y al mundo científico en nuestras islas”. En este sentido, recordó el objetivo de llegar a destinar un 2% del presupuesto a la ciencia y la investigación en 2030:
“Necesitamos crecer mucho más en recursos públicos y también en estrategias público privadas”, dijo la presidenta, para recordar «la necesidad de trabajar para hacer posible más carreras investigadoras, con medidas contra la precariedad y nuevas estructuras como el futuro Instituto de Investigación de las Illes Balears, dedicado a retener y captar talento».
Finalmente, recordó también una vez más el trabajo que lleva a cabo el Govern en este sentido desde el año 2015 de manera transversal con proyectos como el nuevo SOIB Investigación “que servirá para contratar 150 investigadores en la UIB” o iniciativas como las que han permitido incrementar los contratos pre y postdoctorales.
Por su parte, el conseller Company resaltó que «esta ley es una apuesta por la sociedad del conocimiento y por políticas que impulsan la diversificación económica desde la investigación. Nadie puede ayudar más al impulso de esta sociedad que una comunidad científica fuerte con un marco legal adecuado a los tiempos actuales».
Los participantes en el coloquio posterior trataron sobre diferentes aspectos de la ley y las propuestas que desde el sector se pueden hacer en el nuevo Plan de la Ciencia que se tiene que aprobar este año. La Ley de la ciencia prevé varias medidas para fomentar la actividad científica como motor de diversificación económica y transformación del modelo productivo.
Una es la creación del Instituto de Investigación de las Islas Baleares (IRIB), para retener y atraer talento investigador. Además, también aborda el impulso de las carreras científicas para mejorar las condiciones laborales y fomentar las vocaciones científicas. Por otro lado, la nueva norma también establece un marco normativo para favorecer la inversión privada a través del impulso de convocatorias dirigidas a empresas, el fomento del mecenazgo o un sistema de certificación, entre otros.