Sofía Alonso y María Ángeles Fernández, durante la presentación del programa ABRIC
El Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) ha dado un paso más en la especialización de sus programas de acogida familiar con la puesta en marcha de la experiencia piloto denominada ABRIC.
Se trata de una iniciativa implantada, por ahora, únicamente en el País Vasco, que, en palabras de la consellera de Drets Socials del Consell de Mallorca y presidenta del IMAS, Sofia Alonso, busca “ofrecer el entorno más adecuado y óptimo a todos los niños, niñas y adolescentes en régimen de acogida temporal que presenten dificultades conductuales y necesidades especiales relacionadas con sus emociones”.
Acompañada por el vicepresidente primero del IMAS, Jaume Tortella, y la directora insular de Infantesa i Família, María Ángeles Fernández, la consellera insular se ocupó de presentar este nuevo programa, que se enmarca en el modelo de atención centrada en la persona que la institución asegura aplicar y fomentar en todos sus servicios.
Nuevo modelo de intervención
Por su parte, María Ángeles Fernández comentó que ABRIC constituye “un modelo de intervención especializada que requiere un perfil de familia acogedora muy concreto. Nuestro objetivo es empezar con un total de 10 núcleos familiares con formación y titulación en el ámbito sociosanitario o educativo”.
En efecto, las necesidades especiales de los niños y adolescentes a los que va dirigido el proyecto ABRIC requieren esta tipología concreta de familia, dado que su formación y experiencia laboral les aporta los recursos y herramientas necesarias para atender a los menores y afrontar las distintas situaciones que puedan originarse.
Siguiendo esta pauta, el departamento dirigido por Sofía Alonso ya se ha reunido con representantes de los diferentes colegios profesionales, como médicos, educadores sociales o psicopedagogos.
Desde el IMAS, el seguimiento y apoyo que se ofrecerá a las familias que formen parte de ABRIC es idéntico al de cualquiera de las líneas de acogida activas hoy en día, aunque contempla una formación específica.
Asesoramiento permanente
De esta manera, el organismo vinculado al Consell de Mallorca brinda orientación y asesoramiento permanente durante el tiempo que se prolongue la acogida, atención telefónica de urgencias las 24 horas del día, y la concesión de ayudas económicas mensuales para cubrir las necesidades de los niños acogidos.
Dependiendo del perfil y las características propias de cada uno de los niños o jóvenes, la cantidad a percibir oscila entre los 505 y los 1.560 euros. Sin embargo, en el caso específico de este programa, y debido a los requisitos que se reclaman a las familias y las circunstancias de las personas menores acogidas, la cifra mínima es de 1.260 euros.
En este sentido, la presidenta del IMAS explicó, durante la presentación, que, precisamente con la finalidad de fortalecer y consolidar todos los programas de acogida familiar, este año el Consell ha incrementado en 100 euros todas las ayudas. A estas prestaciones se les ha aplicado también el incremento del 5,5 por ciento del IPC.
Más menores en hogares que en centros de acogida
Según el IMAS, Mallorca es uno de los territorios del Estado en las que el número de menores que conviven con familia de acogida (concretamente, 514) es superior a los que residen en centros (365).
Ahora, con esta nueva línea de acogida, el IMAS amplía y también especializa su propuesta de programas. Las otras modalidades ya consolidadas son Cangur, con un total de 50 niños acogidos de forma temporal en un núcleo familiar; Nido, con 74 niños y niñas conviviendo de forma normalizada con una familia, y ACOTE, dirigido a menores extranjeros no acompañados, con 14 menores ubicados en entornos de la misma procedencia o conocedores de su cultura para facilitarles su integración y crecimiento personal.