La nueva tecnología, que ofrece el Laboratorio de Análisis Clínicos de Juaneda Hospitales, dirigido por la Dra. PhD Laura García Ferragut, avisa de riesgos de complicaciones tromboembólicas o hemorrágicas tras procedimientos como la cardialgia y la radiología intervencionista. La prueba que se puede realizar a pie de cama, si el paciente está ingresado, y también en consultas externas, ofrece resultados rápidos y fiables en tan solo una hora de procesado.
¿Qué ocurriría si un sistema plaquetario ‘excesivamente motivado’ por una medicación, o porque detecta un catéter o un stent que se han introducido en un vaso en un procedimiento intervencionista, como los usados en cardiología o radiología, y las plaquetas se agregan formando un trombo? ¿Qué sucedería, si por el contrario, la respuesta plaquetaria es mínima y se produce una hemorragia? Los riesgos son evidentes. La tecnología médica ha dado con la solución para prevenirlo.
Juaneda Hospitales es el primer grupo hospitalario balear en implantar el Sistema VerifyNow, un instrumento de medición de la agregación plaquetaria, portátil, automatizado y de muy rápida respuesta, con la posibilidad de ser utilizado a pie de cama o en pacientes de consultas externas, que detecta la actividad plaquetaria, midiendo la agregación in vitro de una muestra de sangre expuesta a agonistas específicos.
Los medicamentos del grupo de los antiagregantes plaquetarios, como la Aspirina o los inhibidores del receptor P2Y12 (Clopidogrel, Prasugrel, Ticagrelor, Ticlopidine…) son fármacos que inhiben la agregación plaquetaria e impiden la formación de trombos y otros eventos isquémicos en pacientes de riesgo. Son ampliamente utilizados en la prevención secundaria de eventos trombóticos, especialmente después de procedimientos cardiovasculares y cerebrovasculares que utilizan stents.
La respuesta inadecuada a una de estas terapias antiplaquetarias puede aumentar significativamente el riesgo de sufrir infarto de miocardio, trombosis del stent y mortalidad. Por el contrario, la respuesta excesiva a estos medicamentos puede aumentar el riesgo de complicaciones hemorrágicas. Es por tanto un valor añadido, realizar una monitorización del efecto antiplaquetario del fármaco.
Hasta un 30% de los pacientes sometidos a tratamientos antiplaquetarios puede que no obtengan el efecto esperado. Los motivos son varios, desde la coexistencia de otras patologías como la diabetes, hasta interferencias por otros fármacos o la presencia de mutaciones genéticas que afectan a la cinética del antiagregante.
Esta nueva prueba evalúa todos estos factores conjuntamente y permite saber si la dosis administrada se encuentra dentro de la ventana terapéutica, ayudando a la toma de decisiones durante el tratamiento, lo que puede impactar en los resultados clínicos, el tiempo de estancia prequirúrgico, el uso de terapias médicas alternativas, la utilización de hemocomponentes o la adherencia del paciente al tratamiento.
“Ante algunos procedimientos en particular –explica Laura García, doctora en Ciencias Químicas y directora de los laboratorios de análisis clínicos de Juaneda Hospitales– como son los de cardiología intervencionista puede interesar que no se agreguen tanto las plaquetas, ya que cuando se introduce un stent dentro de un vaso, las plaquetas pueden tender a reaccionar de ese modo y formar un trombo”.
Para evitar estos escenarios, se administra un tratamiento preventivo antiagregante y este nuevo equipo nos permite monitorizar cuál es la respuesta de las plaquetas, ver si se están agregando mucho o poco, es decir, la nueva técnica monitoriza la respuesta funcional de las plaquetas.
El Sistema VerifyNow mide la actividad plaquetaria in vitro mediante la técnica de agregometría por transmisión de luz. La reactividad plaquetaria se correlaciona con el aumento de la transmisión de la luz a través de una muestra de sangre del paciente, tras la activación de las plaquetas con varios agonistas.
“Si hay baja reactividad plaquetaria –explica la Dra. Laura García–se detecta un decrecimiento en la luz que es transmitida y detectada, mientras que si hay alta reactividad plaquetaria la luz transmitida y detectada aumenta.”
Y es que “los medicamentos utilizados para bloquear la activación plaquetaria son la causa más común de disfunción plaquetaria en comparación con otros trastornos como los de tipo hereditario y, a diferencia de otras pruebas, el sistema evalúa la respuesta del paciente a la mayoría de las terapias antiplaquetarias”.
Esta prueba puede ayudar a identificar a pacientes en riesgo de eventos adversos cardiovasculares mayores consecuencia de una respuesta deficiente al tratamiento, indicando si el antiagregante plaquetario que le ha pautado su médico es o no es seguro y eficaz. Se trata de una nueva herramienta para todo el sistema de salud para evitar complicaciones hemorrágicas o tromboembólicas y con una amplia gama de posibilidades.
Desde esta perspectiva es de utilidad en diferentes áreas y especialidades médicas como la medicina transfusional, radiología intervencionista, traumatología, cardiología, cirugía, anestesiología, neurología o neurorradiología intervencionista, estando especialmente indicado antes de una cardiología intervencionista y en procedimientos de neurointervencionismo como es el caso de los aneurismas intracraneales.