La semFYC (Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria) ha exigido recientemente a través de un comunicado una intervención de urgencia para dotar de recursos humanos y materiales a las Unidades Docentes de Medicina de Familia y de Atención Familiar y Comunitaria. Para ello ha remitido un informe al Ministerio de Sanidad.
En este informe se plasma el escenario actual que viven muchas Unidades Docentes. A las jubilaciones de los tutores —para las que no hay reemplazo—, la falta de tiempo por la sobrecarga asistencial y el nulo reconocimiento a su actividad para la cual no hay tiempo asignado, se suman en este momento las renuncias de algunos de ellos ante la incapacidad para poder tutorizar adecuadamente.
Este escenario no es homogéneo en todas CCAA, aseguran, con una gran disparidad en cuanto a legislación, medios o formas de reconocimiento. Para la semFYC, la situación actual es el resultado de años de falta de previsión ante un recambio generacional que ya se conocía y de la falta de presupuesto y reconocimiento de la AP en el Sistema Nacional de Salud.
La sociedad científica remite ahora al Ministerio de Sanidad un documento con las carencias detectadas y con las propuestas correctoras. Las unidades docentes de Medicina de Familia y Comunitaria son clave para garantizar el futuro de la especialidad ante la inminente ola de jubilaciones de médicos de familia; entre estos hay un elevado número de tutores y tutoras.
Aunque sin datos concretos sobre cuántos de ellos se van a jubilar, según un documento del Ministerio de Sanidad este es uno de los mayores retos a los que debe hacer frente el SNS en los próximos años. Este documento es el “Informe Oferta-Necesidad de Especialistas Médicos 2021-2035” de Patricia Barber Pérez y Beatriz González López-Valcárcel.
El estudio cuantifica una pirámide de edad altamente envejecida, con los mayores porcentajes de profesionales con 60 y más años (33,2%) y de 50 y más años (60,2%). En cifras absolutas, esto se cuantifica con una ola de jubilaciones que podría afectar hasta a 12.000 médicos de familia.
“Aunque puede parecer que la cuestión de las unidades docentes es un elemento de orden interno, los ciudadanos deben saber que poner en compromiso la continuidad de la tutorización de futuros especialistas supone un grave peligro para la disponibilidad de suficientes médicos de familia en el Sistema Nacional de Salud a corto-medio plazo: se rompe la tasa de reposición y no hay médicos”.
Son palabras de la presidenta de la semFYC, María Fernández.” La gravedad de la situación ha impulsado a la semFYC a remitir al Ministerio de Sanidad un informe analítico que contiene paquetes de propuestas correctivas, entre las que se incluye la limitación a 1.500 pacientes asignados como máximo por especialista.
Se pide también la consideración de diversos indicadores para poder realizar el cálculo de pacientes asignados en función de variables como la morbilidad; la disposición de 1 hora diaria (o 5 horas semanales) de tutorización en la agenda, y limitar la actividad asistencial diaria de los tutores a 20 – 30 pacientes.
En concreto, sobre la actividad diaria en consulta, se propone que esta debería estar distribuida de tal modo que el porcentaje de atención a demanda (presencial o domicilio) sea menor o igual al 70%, y el porcentaje de atención programada (presencial o domicilio) mayor o igual al 30%.
En la actualidad, las tareas formativas que asumen las Unidades Docentes, así como los tutores, se están realizando de forma totalmente altruista y sin reconocimiento, o de una forma mínima y muy desigual en las distintas CCAA. En la mayoría de los casos, la actividad se desarrolla sin suficientes medios humanos ni materiales; y los tutores no tienen ni espacios apropiados, ni tiempo.
A esta situación se suma la desaparición de tutores por jubilaciones, así como por la falta de «plazas perfiladas» en los procesos de selección, movilidad y promoción interna. Esto conlleva una disminución de capacidad docente de los centros de salud acreditados, en los que, habitualmente, los tutores son reemplazados por profesionales que no han ejercido la labor tutorial.
“La situación pone en compromiso el derecho a la formación de calidad de quien se está formando como especialista en Atención Primaria de Salud”, afirma Cruz Bartolomé, responsable de Desarrollo Profesional de la semFYC. “Siendo que el sistema MIR de nuestro país está considerado como una de las formaciones de especialidad médica mejor valoradas del mundo, la semFYC considera que es necesario hacer un esfuerzo por parte de todos los actores implicados para preservarlo como lo que es”, concluye María Fernández.
Consulte el documento aquí “Unidades Docentes y Tutores. La formación de los y las especialistas”