La direcciones generales de Planificación, Ordenación y Centros y de Personal Docente, han elaborado un protocolo de actuación al ámbito educativo frente altas temperaturas con el fin de velar por el bienestar y la salud de la comunidad educativa. El documento se ha enviado hoy a los centros de las Illes Balears.
La Conselleria ha elaborado un protocolo con medidas y actuaciones que se pueden seleccionar, adaptar, concretar y poner en práctica por parte de los centros docentes para planificar las actuaciones que les permitan minimizar o neutralizar las consecuencias de las altas temperaturas.
El hecho de disponer de un protocolo de actuación como éste ha de permitir reducir el tiempo necesario para resolver cada situación, así como reducir el margen de error en las decisiones que haya que adoptar, ya que se basarán en el análisis previo de las medidas organizativas específicas de cada centro.
Los objetivos del protocolo son velar por el bienestar y la salud de los miembros de la comunidad educativa, garantizar la al alumnado en las situaciones excepcionales y adaptar la prestación del servicio en estas situaciones. Proporcionar pautas, procedimientos organizativos y directrices de actuación.
También, garantizar la respuesta y la aplicación inmediatas de medidas de atención y protección para evitar consecuencias lesivas para las personas, incrementar los niveles de seguridad con la coordinación de actuaciones con los servicios sanitarios, de emergencias y de Protección Civil de la en torno al centro docente.
El protocolo tiene por objetivos crear hábitos de comportamiento de autoprotección entre todos los miembros de la comunidad educativa, fomentar entre el alumnado las actitudes y competencias propias de la cultura de la prevención, conocimientos y acciones para responder adecuadamente ante la adversidad meteorológica.
El protocolo recomienda desde la preparación que va desde planificar las actividades extraescolares o acontecimientos en espacios exteriores a la supervisión del estado de estas instalaciones. Se puede activar entre el 1 de junio y el 31 de julio, y del 1 al 30 de septiembre, sin perjuicio de otros momentos.
Serán la Dirección General de Planificación, Ordenación y Centros la que informará en las escuelas de la activación del protocolo a partir del boletín de la Dirección General de Emergencias e Interior y con los valores aportados diariamente por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
La información que se proporciona es predictiva y establece cuatro niveles de alerta meteorológica: verde, amarillo, naranja y roja. La alerta se activa a partir del nivel amarillo. Para el nivel de alerta amarillo se establecen medidas generales.
A partir del nivel naranja las medidas organizativas se amplían, son más específicas, teniendo en cuenta las actividades lectivas, las complementarias y extraescolares, y los servicios complementarios, como la escuela matutina, el comedor escolar y el transporte escolar.
El protocolo también informa sobre cómo hidratarse, permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados, refrescarse cada vez que se necesite, o consultar a un profesional sanitario ante síntomas que se prolonguen más de una hora y que puedan estar relacionados con las altas temperaturas.
Por otra parte, se prevé que este protocolo se complemente con la medida anunciada por el Ministerio de elaboración de un plan de adaptación climatológica para mejorar las condicionas de confort termohigrométrico, así como las de calidad y renovación del aire en los centros educativos públicos.
Todo ello en el marco de los programas de cooperación territorial del Ministerio de Educación y Formación Profesional, durante el próximo 2023. Este plan incluirá estudios técnicos específicos de análisis de la realidad bioclimática y de confort de los centros docentes.
El objetivo es fijar sus características a partir de su ubicación geográfica, orientación, grado de exposición al sol, tipología constructiva, materiales de construcción empleados, calidad del aislamiento, etc., para realizar aislamiento térmico, ventilación, instalación de sistemas de climatización o zonas de sombra en exteriores.