El Servicio de Salud de las Illes Balears (Ibsalut) ha sido el primero de España en obtener la certificación de nivel alto del Esquema Nacional de Seguridad. Esta certificación es un reconocimiento a la gestión de la seguridad de la información, dota de confianza la relación con los ciudadanos.
Según una nota de prensa del Govern balear «demuestra el compromiso del Ibsalut en garantizar la privacidad y la seguridad de la información en el tratamiento de los datos de pacientes». Todas estas cuestiones se analizan en el XX Foro de Seguridad y Protección de Datos de Salud, en el Hospital Son Espases, con 400 profesionales.
El Ibsalut puso en marcha hace ya más de quince años diferentes proyectos relacionados con la seguridad de la información y protección de datos. Dispone de un servicio específico que empezó en 2008 y que está integrado por una quincena trabajadores.
En materia de protección de datos y seguridad, hay que remarcar el volumen de información que trata el Ibsalut, como atestiguan los ejemplos siguientes: recibe una media de 100.000 correos electrónicos al día, de los cuales un 95 % son bloqueados, por el hecho de ser considerados correos basura, maliciosos, etc.
Cada año se abren aproximadamente 3,5 millones de historias clínicas. Recibe 15.000 peticiones de acceso a historias clínicas por parte de los pacientes. Unos 22.000 profesionales están sujetos a medidas de seguridad, identificación y control de acceso.
Además, desde el mes de diciembre, el Ibsalut ha puesto en marcha la Coordinación Autonómica en Seguridad de la Información, que apoya a todas las gerencias en materia de protección de datos y seguridad de la información.
Bajo el lema «Impacto y riesgos de la inteligencia artificial de salud», el Foro girará sobre uno de los retos en materia de protección de datos y seguridad, como es la implantación de la inteligencia artificial en áreas como la atención o la investigación sanitaria.
A la inauguración del Foro ha asistido la consejera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, el director del Ibsalut, Manuel Palomino, la subdirectora de Tecnología de la Información, Mari Carmen Moreno, y el coordinador autonómico de Seguridad de la Información, Miguel Ángel Benito.
Los ciudadanos tienen el derecho fundamental a que sus datos personales estén protegidos. En el ámbito sanitario, este derecho cobra más relevancia por la sensibilidad de los datos. Así, hay que hacer frente a nuevos riesgos, inherentes en los nuevos canales de comunicación.
Para ello se analizan las herramientas empleadas y su potencial uso malintencionado. Estos riesgos se tienen que analizar y prevenir en el tráfico permanente de información y operaciones que se produce cada día: obtención, tratamiento, archivo, custodia y transmisión de información y documentación clínica.