No podemos hablar en nombre de quien ya no está, de forma física y presencial, pero sí sigue con nosotros porque detectamos su esencia, carisma y liderazgo persistente en el proyecto. Joan Calafat se marchó prematuramente, en abril de 2022, con la idea de que algún día Salut i Força albergaría unos premios propios sanitarios que promovieran la investigación y reconocieran el gran talento sanitario y científico de nuestros profesionales. Sin él, pero con él, los galardones que llevan su nombre, se consolidaron en su segunda edición. De la tristeza, la lágrima encogida y la nostalgia del año pasado, se ha pasado al bonito recuerdo, a constatar su sonrisa y buen hacer y a reflexionar sobre su gran trayectoria. La gala de la segunda edición fue quizá con el mismo sentimiento, pero transcurrió como le hubiera gustado a Joan, entre abrazos, risas, bromas y, por supuesto, una buena cena informal donde saludar uno a uno a todos los presentes.
Eso habría querido él. Mención especial a la cercanía de todos sus amigos plasmada en abrazos y confidencias con su dupla sucesora, Beda Trinidad y Carlos Hernández. El cariño del jurado, de los premiados y de los asistentes por el proyecto Salut i Força tras 29 años, sigue más vivo que nunca. Gracias infinitas a los patrocinadores de la gala, Farmadosis, BIOIB y Hotel Garden, gracias a los colaboradores que nos refuerzan en el camino todo el año en nuestro periódico que alcanza los 525 números ya, mención especial a la presencia de Quirónsalud, con Víctor Ribot y Dico Sbert, también para Manuela García y Javier Ureña, todos ellos sabiendo de la importancia de no fallar a la cita un año más, aunque vale para TODOS y TODAS las presentes. A todos, mil gracias por tanto cariño y afecto hacia Joan y hacia todos los que hacemos Salut i Força posible, el medio de referencia de los profesionales sanitarios y de los pacientes.
