Juan Riera Roca /
Los senadores populares de las Illes Balears, Miquel Ramis, Cati Soler y Santi Marí, han presentado una moción en el Senado que se debatirá en la Comisión de Energía, Turismo y Agenda Digital para instar al Gobierno a seguir impulsando acciones que combatan las situaciones de abusos que se están produciendo por parte de turistas británicos.
Los senadores populares instan a utilizar los medios diplomáticos y la Consejería de Turismo en Londres, así como cualquier otro medio a su alcance, para detectar, corregir y evitar que denuncias falsas de intoxicaciones alimentarias en establecimientos hoteleros españoles se sigan produciendo, perjudicando al sector turístico y a la Marca España.
El informe de la Asociación Británica de Agentes de Viaje (ABTA) indica que las reclamaciones por intoxicación alimentaria de turistas británicos crecieron un 131% de 2015 a 2016. Según estimaciones del sector turístico, las peticiones que los turistas británicos han realizado por supuestas intoxicaciones ascienden a más de 50 millones de euros.
Se trata –en muchos casos –de falsas denuncias por supuestas intoxicaciones que, casi siempre, se canalizan a través de los mismos bufetes de abogado especializados. Los hoteleros han comprobado cómo ciudadanos británicos actúan en las propias zonas turísticas como ‘comerciales’ de esos abogados y persuaden en la misma calle a potenciales clientes.
Sobre el terreno y durante los días de disfrute de sus vacaciones tratan de convencer a estas personas de que pueden conseguirles unas vacaciones gratis si denuncian problemas como intoxicaciones alimentarias [fuentes policiales han detectado que también se denuncian falsas violaciones porque en ese caso el seguro de viaje indemniza].
“La realidad es que la legislación británica se lo pone fácil. Para realizar una reclamación falsa, al ciudadano británico le basta probar que ha comprado un fármaco. Luego eso se vista de informes médicos, muchas veces realizados meses después, y se reclama ante la justicia británica”, explica el senador balear Miquel Ramis.
La explicación a esta estafa hay que encontrarla en la reforma de la Ley Jackson de 2013, por el que se deja fuera del arbitraje de consumo las reclamaciones de servicios prestados fuera de Gran Bretaña. En el Reino Unido, el reclamante no tiene que acreditar la enfermedad explica el senador balear encargado del caso, y añade:
“El coste legal al que se enfrenta el reclamado en caso de exigir dicha acreditación suele ser mayor que la propia indemnización”. El senador por Mallorca Miquel Ramis será el encargado, por parte del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, de defender la moción en la Comisión de Energía, Turismo y Agenda Digital.