Juan Riera Roca /
En su Asamblea anual en Reikiavik, celebrada recientemente, la Asociación Médica Mundial (AMM) aprobó una resolución urgente sobre migración instando a sus miembros y a la comunidad de salud internacional a abogar por la atención médica necesaria para los países que reciben a un gran número de migrantes.
La declaración parte de una iniciativa de la delegación del Consejo General de Colegios de Médicos (CGCOM) con apoyo de la Orden de Médicos de Francia y de la Confederación Médica Latinoiberoamericana y del Caribe (CONFEMEL).
La AMM entiende que la salud es un recurso básico para la vida, un derecho humano y uno de los motores del desarrollo económico y social y que el aumento de las migraciones es un fenómeno ligado a los avances y características del Siglo XXI.
La AMM reitera su resolución sobre los refugiados y los inmigrantes adoptada en octubre 2016.
La AMM le pide asimismo a las asociaciones médicas nacionales y a la comunidad internacional de la salud a que aboguen por:
1. Reforzar el compromiso permanente de los médicos en la defensa de los derechos humanos y dignidad de las personas en cualquier parte del mundo, así como en la lucha contra el sufrimiento, el dolor y la enfermedad.
2. Priorizar la atención a los seres humanos por encima de cualquier otra consideración o interés.
3. Proporcionar la necesaria asistencia sanitaria por conducto de la cooperación internacional a los países que acogen y reciben grandes poblaciones de migrantes.
4. Instar a los Gobiernos a que lleguen a un acuerdo político para conseguir recursos sanitarios necesarios para atender de una forma adecuada y coordinada a la población migratoria.
La AMM resalta el papel de los médicos que apoyan activamente y promueven el derecho de todos a recibir atención médica sólo en base a la necesidad clínica y se pronuncian contra la legislación y prácticas contrarias a este derecho fundamental.