JUAN RIERA ROCA / El Área de Salud de Menorca ha activado un programa para cuidar la salud bucodental de los enfermos de cáncer, reduciendo el riesgo de afecciones bucales derivadas de los tratamientos oncológicos. Colaboran los servicios de Oncología y de Cirugía Maxilofacial del Hospital Mateu Orfila y equipos de odontología de la atención primaria.
Se trata de un programa pionero en el conjunto de la red asistencial del Ibsalut, dirigido a la prevención de la salud bucodental de los pacientes oncológicos. Se implantó a finales del año pasado gracias a la colaboración de los servicios de del Hospital Mateu Orfila y de atención primaria. BorjaNavas y Francisca Emanue son dos de los profesionales encargados del proyecto.
El programa va dirigido a todos los pacientes oncológicos de Menorca, con visitas a antes, durante y después de un tratamiento terapéutico o farmacológico, con el objetivo de evitar o minimizar las complicaciones orales que puedan aparecer y así mejorar la calidad de vida de estos enfermos.
Estudios científicos evidencian, según señalan fuentes asistenciales, que sufren problemas bucodentales casi todos los pacientes tratados de un tumor maligno en la cabeza o en el cuello y en torno al 40 % de los que se han sometido a quimioterapia para tratar otros tipos de cáncer.
De la misma forma, señalan fuentes clínicas del Área de Salud de Menorca, los pacientes que se someten a un tratamiento dental para resolver enfermedades periodontales y dentarias previas muestran una reducción significativa de las complicaciones orales asociadas a la quimioterapia.
La xerostomía (sequedad de la boca), la micosis, la gingivitis, la aparición de llagas, el dolor y la sensibilidad dental son algunos de los efectos secundarios que puede producir la quimioterapia, mientras que la radioterapia puede provocar desde caries a complicaciones más importantes y graves en los huesos maxilofaciales o en tejidos y músculos de la cavidad bucal.
Los oncólogos son los responsables de hacer las derivaciones de los pacientes hacia los gabinetes odontológicos de los centros de salud Dalt Sant Joan (Maó), Es Banyer (Alaior) y Canal Salat (Ciutadella), que establecen el plan de prevención, diagnostican, aplicar el tratamiento y hacer el seguimiento.
Cada usuario se somete a un programa de visitas que empiezan antes del tratamiento oncológico y que se prolongan con controles hasta dos años después de haber completado las sesiones de quimioterapia o radioterapia. Los odontólogos y los higienistas dentales también dan pautas a los pacientes para reforzar sus hábitos de higiene bucodental y controlar su dieta con el fin de prevenir complicaciones.
