JUAN RIERA ROCA
El grupo de investigación en Zoología Aplicada y de la Conservación de la Universitat de les Illes Balears (UIB) ha comenzado, con la colaboración del Ayuntamiento de Palma, una campaña de recogida de insectos en algunos parques de la ciudad. Se hace en el marco de un estudio que tiene como objetivo identificar las especies de insectos que pueden actuar como vectores de enfermedades.
Los parques de las ciudades son zonas verdes con más probabilidad de que haya interacciones entre la fauna (aves, insectos, etc.), los humanos y las mascotas. Conocer estas interacciones resulta de interés para prevenir el riesgo de problemas asociados a la presencia de determinados insectos vectores.
Un ejemplo conocido recientemente ha sido la circulación del virus del Oeste del Nilo en diferentes territorios de la Península Ibérica. En este caso, la interacción se produce entre los pájaros, los mosquitos y los humanos. El estudio de estas relaciones se incluye en el concepto de salud única (one health).
Este concepto sostiene que la salud de los humanos, los animales y los ecosistemas, del tipo que sea, están íntimamente ligados. La pandemia por Covidien-19 es un ejemplo claro de la importancia que tiene el concepto de salud única y la función que puede tener la prevención.
Se colocarán en tres parques de Palma, ubicados en zonas con características diferentes, cuatro tipos de trampas, diseñadas para capturar mosquitos tigre, flebotomos (beatas) y culicoides, que se alimentan de sangre humana o de animales (pájaros, mascotas, etc.) y son transmisores potenciales de enfermedades.
El Servicio de Parques y Jardines, del Departamento de Infraestructuras y Accesibilidad del Ayuntamiento de Palma, ha autorizado el uso de estos espacios para llevar a cabo el estudio, que comenzará en el mes de octubre y durará hasta final de noviembre de este año.
Las trampas quedarán instaladas al final del día y las irán a buscar al día siguiente durante el horario en que los partes estén abiertos. Asimismo, se adoptarán medidas para garantizar que nadie externo no pueda acceder, manipular ni retirarlas.
La colaboración del Servicio de Parque y Jardines ha sido primordial para poder emprender el estudio a los parques de la ciudad más adecuados para el tipo de muestreo.
El proyecto forma parte de la actividad de investigación del grupo de Zoología Aplicada y de la Conservación de la UIB, coordinado por el doctor Miguel Ángel Miranda, y con la participación de los doctores Carlos Barceló y Rafael Gutiérrez (investigador del programa Margalida Comas para jóvenes investigadores).