El grado de Medicina, con un 12,534, la nota de corte más alta de los estudios que ofrece la UIB
La siguen Bioquímica, con un 11,571, Enfermería en Eivissa, con un 11,412, y las dobles titulaciones
La UIB publica ha publicado el resultado de la primera fase de matrícula. Tras el proceso de preinscripción, los estudiantes que han pedido plaza en la UIB en uno de los grados que se ofrecen, pueden consultar por UIBdigital si han sido admitidos en el estudio que han solicitado. Habitualmente muchos estudiantes solicitan plaza en diferentes universidades y se matriculan en el centro que más les interesa. Entonces las plazas se redistribuyen según la nota. El proceso de matrícula acabará en septiembre, y es cuando la UIB tendrá las notas de corte definitivas.
Según los datos de la primera lista de admitidos de la UIB, Medicina es el grado con la nota de corte más alta, un 12,534 sobre 14 puntos; seguido del Grado de Bioquímica, con un 11,571; el grado de Enfermería en Eivissa, con un 11,412; la doble titulación de grado de Economía y grado de Turismo, con un 11,128; y la doble titulación de grado de Matemáticas y grado de Ingeniería Telemática, con un 11,102; o el grado de Enfermería en Palma, con una nota de corte de 10,662, y en Menorca, con una nota de corte de 10,326.
Los alumnos que han sido admitidos pueden aceptar la plaza por UIBdigital y formalizar la matrícula o hacer una reserva de plaza mientras esperan si han sido admitidos en otra universidad; pueden no decir nada, lo que supone renunciar a la plaza (porque pueden haber escogido matricularse en otra universidad); o manifestar que quieren esperar a la próxima lista de admitidos, para ver si mejoran su preferencia (en el caso de estudiantes que han sido admitidos en segundas o sucesivas preferencias).
“De no haberse implantado Medicina en la UIB hubiera renunciado a mi vocación”
Natalia Collado, gracias a su nota de media, ha logrado una de las 60 plazas de la primera promoción
Natalia Collado Moll puede presumir de haber logrado una de las 60 plazas para estudiar el primer curso de la primera hornada de médicos que estudiarán en la recientemente creada Facultad de Medicina de la UIB. No ha sido nada fácil, porque había más de 2.000 preinscritos que aspiraban a estudiar estos nuevos estudios implantados. Una cifra que explica la gran demanda de una carrera que se reivindicaba hace más de 40 años cuando en las primeras manifestaciones. A Natalia nadie le ha regalado nada, ni mucho menos. Se lo ha ganado por su alta calificación. Asegura Natalia que desde pequeña en casa se le inculcó que la disciplina era importante y para ello, a partir de los cinco años empezó danza clásica en la Escuela de Danza de Madre Alberta, formación que realizó durante 9 años. A los 6 años empezó piano en la Escuela de Música de Madre y con tan sólo 8 años ganó el primer premio en Sóller. En otra escuela de música cursó estudios oficiales hasta llegar a sacar 8º de Piano del Trinity College. Sólo le queda la diplomatura pero al coincidir con 2º de Bachillerato tuve que hacer un paréntesis para dedicar todo mi tiempo a mis estudios. Conversamos con ella.
P.- Enhorabuena, ¿qué sientes al saber que eres una de las 60 estudiantes de la primera promoción de Medicina de la UIB? Supongo que muy orgullosa.
R.- Muchas gracias. Sí, la verdad es que me siento muy orgullosa y feliz. Para mí, es un gran logro haber llegado hasta aquí y ver que todo el tiempo que he invertido ha dado su fruto. Y he podido ver de primera mano que todo esfuerzo tiene su recompensa.
P-. Más que suerte, lograr una plaza de las 60 entre 2.000 candidatos significa que eres buena estudiante. ¿Qué nota tenías? ¿Sabes que Medicina era la más alta de la UIB?
R.- Exactamente. No creo en la suerte en estos casos sino en el trabajo duro y constante, porque eso es lo único que nos puede llevar a lograr lo que realmente queremos. Respecto a las notas, he acabado con un 9.32 de media total del Bachillerato y de Selectividad un 12.47. Sí, lo vi en el periódico. Pienso, que era de esperar que este grado tuviera una de las notas más altas pues actualmente es una de las carreras más demandadas.
P.- ¿Conoces alguno de los otros 59 que han obtenido plaza? Porque muchos vendrán de fuera o de otras islas.
R.- No, pero tengo muchas ganas de conocer a gente nueva.
P.- ¿Desde cuándo supiste tu deseo por estudiar Medicina?
R.- Desde pequeñita siempre tuve curiosidad por el trabajo de los médicos y fue ya en bachillerato que descubrí mi verdadera vocación.
P.- Supongo que aún no has decidido la especialidad…
R.- Pues no la verdad, pienso que una decisión tan importante en mi vida necesita mucha reflexión y tiempo. Creo que necesito ver durante estos seis años cuál es la rama de la medicina que realmente me gusta.
P.- De no haberse implantado en Palma, ¿hubieras estudiado fuera o renunciado a tu vocación estudiando otra especialidad?
R.- Pues lamentablemente hubiera tenido que renunciar a mi vocación estudiando otro grado, ya que económicamente no nos lo podríamos haber permitido. Tengo una hermana gemela que como yo, este año empieza sus estudios en la Universidad, y las ayudas que ofrece el Estado (becas) son prácticamente nulas. La única ayuda que he podido conseguir ha sido por ganar uno de los Premios que da la Conselleria a las notas más altas de la PAU.
P.- ¿Has podido ya visitar Son Espases, donde serán las aulas de estudio? Si no has ido, ¿has seguido en prensa las instalaciones?
R.- No, no he ido pero sí lo he seguido en prensa.
P.- ¿No crees que debería haber unanimidad con respecto a la creación de la Facultad? Lo digo por la oposición de Podemos. Sí. Pienso que en temas como la Educación y la Sanidad, debería haber un consenso entre todos los partidos políticos actuales. Y sobre todo en la rama educativa, deberían tener en cuenta que en la situación de crisis que estamos viviendo, sólo los más favorecidos económicamente disfrutan de más facilidades a la hora de acceder a sus estudios. – Finalmente, cuando sea médico, ¿le gustaría quedarse aquí a ejercer?
R.- La verdad es que me es indiferente, tengo claro que para conseguir mis objetivos voy a tener que renunciar a estar cerca de mi familia. Finalmente, quería dar las gracias a mis padres y a mi hermana por haber estado animándome y apoyándome en todo momento, y también por no dudar de que podría conseguirlo.